años después. El dibujo I, de la lámina I (Carolus IV D, G. Hispaniarum Rex) ha sido tomado del papel sellado, cuyo membrete original á la izquierda del escudo, dice: « Sello Qvarto, Vn Qvartillo, Años de Mil ochocientos diez y ochocientos once ». Y en una línea horizontal inmediata, se lee: Para el Bienio de 1812 y 1813 y valga para el Reynado del Sr. D. Fernando VII. La Asamblea eliminó del escudo de Carlos IV los simbolismos reales, y el marco de volutas, conservando las ideas cardinales del campo oval, del timbre y de la corona simple, ligada con lazos de cinta en la base.
El timbre del escudo de Carlos IV era la corona real, y la Asamblea adoptó para reemplazarlo Sol heráldico, resplandeciente, que timbra el Escudo de Armas de España, como primera divisa sobre el León, según los dibujos oficiales á que me referiré más adelante.
Uno de los símbolos clásicos de la Heráldica es el astro soberano. La viñeta adjunta, común en los tratados del Arte y en numerosísimos escudos nobiliarios, lo demuestra en su exacta plenitud. Gourdon de Genouillac, al describirlo,
dice (fig. I): «El Sol es representado generalmente de oro, con la figura de un círculo perfecto y en el medio dos ojos, boca y nariz, completamente rodeado por diez y seis rayos, ocho ondeantes y ocho rectos, colocados alternativamente ». [1] Víctor Bouton en su celebrado Nouveau Traité des Armoiries [2] dice: « El Sol es formado de una cara humana y de rayos « rectos y ondeantes alternativamente. Algunos blasonadores numeran los rayos en doce ó diez y seis: esto depende del artista. El esmalte [3] del Sol
- ↑ L'Art Héraldique, pág. 55. Ofrece el dibujo en la misma página.
- ↑ Nouveau Traité des Armoiries oú la Science de l' Art du blason expliqués, etc. París, 1887, pág. 495.
- ↑ Los colores heráldicos llevan el nombre común de esmaltes y son siete: azur ó azul, gules ó rojo, sable ó negro, sinople, ó verde y púrpura. El blanco es plata y el amarillo es oro. Puede consultarse al respecto, además del diccionario oficial de la lengua castellana, el precioso estudio escrito en francés é impreso con numerosos grabados por J. Adeline y traducido y aumentado considerablemente por José Ramón Mélida, del Museo Arqueológico Nacional de Madrid, edición de 1888. Me basta citar sobre este punto autoridades francesas porque, como dice Bouton «el lenguaje del Blasón es francés en todos los países, en Inglaterra, como en Alemania, en España como en todas partes. Somos los maestros en esta ciencia y en este arte». (Pág. 2, obr. cit.) Algunos autores franceses, sin embargo, añaden un octavo color, el segundo del espectro solar «anaranjado». Los colores heráldicos se llaman ligeros ó blancos, cuando adicionados de blanco resultan claros.—Los colores heráldicos argentinos son pues, en la bandera y en el escudo los siguientes: BANDERA: Celeste y blanco (azur ligero y plata). ESCUDO: Cuartel superior de azur ligero ó blanco; cuartel inferior de plata; gorro frigio de gules; Sol esplendente de oro; manos movientes encarnadas; pica de sable; corona de laurel sinople; lazo de cintas color de los cuarteles.