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Diré que va acertado el que bien quiere, y que es más libre el alma más rendida, á la de amor antigua tiranía.

Diré que la enemiga siempre mía, hermosa el alma como el cuerpo tiene, y que su olvido de mi culpa nace, y que en fe de los males que nos hace, amor su imperio en justa paz mantiene.

Y con esta opinión y un duro lazo, acelerando el miserable plazo á que me han conducido sus desdenes, ofreceré á los vientos cuerpo y alma sin lauro ó palma de futuros bienes.

Tú que con tantas sinrazones muestras la razón que me mueve á que la haga á la cansada vida que aborrezco ; pues ya ves que te da notorias muestras esta del corazón profunda llaga, de cómo alegre á tu rigor me ofrezco, si por dicha conoces que merezco que el cielo claro de tus bellos ojos en mi muerte se turbe, no lo hagas, que no quiero que en nada satisfagas al darte de mi alma los despojos.

Antes con risa en la ocasión funesta descubre que el fin mío fué tu fiesta, mas gran simpleza es avisarte desto pues sé que está tu gloria conocida en que mi vida llegue al fin tan presto.

Venga, que es tiempo ya, del hondo abismo Tántalo con su sed, Sísifo venga con el peso terrible de su canto, Ticio traiga su buitre, y ansimismo con su rueda Egion no se detenga, ni las hermanas que trabajan tanto.