con las nueces juegan los niños, en á pares, ó nones.
- Est etiam, par sît numerus, qui dicat, an impar. Et divinatas auferat augur opes.
Marcial, l. 14, Epig. 18, dice, que muchas veces el demasiado jugar a las nueces ha costado azotes á los niños.
Á un corderito que balaba entre las cabras, le dijo un perro: perdido andas, bobo, no está aquí tu madre; y le mostró á lo léjos las ovejas, que andaban separadas. Yo, respondió el cordero, no busco á aquella que concibe cuando se la antoja, y despues trae por ciertos meses en su seno la cria, que no conoce, y al cabo deja caer en tierra la carga; sino á aquella que me sustenta dándome leche, y se la escasea á sus hijos, porque no me falte á mí. Con todo eso, replicó el perro, mas debes á la que te parió. No hay tal, dijo el cordero; porque ¿de dónde supo ella, si yo naceria blanco