Página:Fernández Saldaña - Diccionario Uruguayo de Biografías (1810-1940).djvu/122

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Poco sabemos de su vida y su actuación en Río Grande, y en lo que concierne a nuestra república, siguió las banderas de Oribe en la Guerra Grande, prestando servicios en la Guardia Nacional de caballería de Tacuarembó primero y luego a órdenes del coronel Quinteros, apareciendo en las listas de setiembre de 1843 con grado de teniente 1°. Se le halla a principios de 1850 encargado de la sub-receptoría de Yaguarí, ascendió a capitán de la Guardia Nacional de Tacuarembó el 8 de marzo de 1851 y a sargento mayor el 26 de setiembre del mismo año, con despachos firmados en Cañada de Cardozo por Oribe y Antonio Díaz.

Durante la administración de Pereira se le encuentra participando en una especie de asonada popular contra el jefe político del departamento Pedro Chucarro, en calidad de jefe de una fuerza que indebidamente le había confiado la Junta Económico Administrativa. Esta explosión en que culminaba una larga serie de rencillas y choques locales, trajo como consecuencia que Azambuya fuera reducido a prisión junto con otros jefes y ciudadanos de entidad en el pueblo, tales como Jacinto Barbat, Modesto Polanco, Félix Castellanos y un hermano suyo Sisifredo Azambuya. El 7 de octubre de 1856 el Superior Tribunal de Justicia, a petición del Poder Ejecutivo, sobreseyó en la causa ordenando la libertad de los presos.

Al inaugurar su gobierno en marzo de 1860, Bernardo P. Berro le confió la jefatura de la Guardia Nacional de Tacuarembó, siendo teniente coronel graduado y el 11 de setiembre del mismo año lo nombró jefe político del departamento.

Bueno como soldado, pero sin pasta de funcionario, reñido con el comandante Barbat, estas peleas y su inhábil gestión en la jefatura a donde llevó como oficial 1° al después famoso Isaac de Tezanos, tuvieron resonancia en la prensa y en el parlamento. Su posición antipática respecto a la colonia brasileña muy numerosa en Tacuarembó, influyó a la vez para que el gobierno imperial, con insistentes reclamaciones diplomáticas provocara la remoción de Azambuya. Berro tuvo que sustituirlo por Eduardo Castellanos, el 12 de junio de 1862 a pretexto de que debía asumir el mando de la Guardia Nacional.

Al principiar en 1863 la invasión revolucionaria del general Flores, se le dió el mando de la división de caballería de Tacuarembó, e incorporado a las fuerzas del coronel Diego Lamas que el 25 de julio de 1863 chocaron en Las Cañas con los floristas, una parte de sus hombres, desmontados, pelearon muy bien, evitando que Lamas experimentase una derrota completa.

A mérito de este comportamiento el gobierno lo ascendió a teniente coronel efectivo de línea el 19 de agosto y en seguida pasó a servir al Salto, llevando consigo un núcleo de oficiales de Tacuarembó, entre ellos

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