tubre del año siguiente y destinado al batallón “Libertad”, era capitán de la 4° compañía cuando este cuerpo de línea — único que había en ese momento en la República — a las órdenes de su jefe el coronel Fortunato Flores, se rebeló el 7 de febrero de 1888 contra la autoridad del dictador, general Venancio Flores, padre del propio coronel sublevado. El sometimiento del rebelde hijo puso fin a este escandaloso episodio de familia, después del cual, conforme a decreto del día 8, Fortunato y su hermano Eduardo fueron dados de baja del ejército y compelido, el primero, a salir del país en plazo de doce horas. En igual pena se les declaró incursos a todos los oficiales de la unidad conjuntamente con algunos militares que habían adherido al movimiento, El estallido de una revolución blanca encabezada por el ex-presidente Berro el 19 de febrero, dejó sin efecto la parte que decía con los oficiales, y Gaudencio y sus conmilitones estuvieron prestamente en Montevideo, aunque recién é incorporado al ejército como sargento mayor graduado el 8 de enero de 1870, obteniendo la efectividad el 18 del mismo mes.
Al servicio del gobierno de Batlle contra las huestes rebeldes del caudillo blanco Timoteo Aparicio en 1870-72, acreditan su actuación los ascensos a teniente coronel el 31 de enero de 1871 y a coronel graduado el 15 del mismo mes del año 72, teniendo bajo sus órdenes un batallón de Guardias Nacionales denominado sucesivamente “Pasivo” y “Resistencia” y después del 28 de febrero de 1872, 4° de Cazadores.
Ajustada le Paz de Abril, el presidente Gomensoro, buen conocedor de nuestros militares, prescindió de Gaudencio, el cual fué a vivir a Durazno, al frente de una casa de Comercio que dejó pronto, regresando en 1874 a hacerse cargo de la administración de “El Uruguay”, político de oposición al presidente Ellauri dirigido por Isaac de Tezanos y notable por la violencia de su propaganda.
Elemento conspicuo de la situación presidida por Pedro Varela después del motín del 15 de enero que trastornó el orden constitucional y amigo personal de Varela, Gaudencio fué designado sucesivamente Comandante Militar del Salto el 23 de enero y Jefe Político del mismo departamento el 22 de febrero. De allí pasó a Paysandú con idéntico destino, hasta que el 3 de mayo se hizo cargo de la Jefatura Política de la capital.
Cuando una parte de la ciudadanía del país, reaccionando contra el régimen de ilegalidad y desorden imperante, se lanzó al campo en la primavera del año para restaurar con las en la mano el imperio de las instituciones, movimiento popular que es conocido por Reacción Nacional o mejor todavía, por Revolución Tricolor, el coronel Gaudencio marchó a ponerse al frente de la columna gubernista destinada a
