LLAMBI, FRANCISCO Toribio
Constituyente del año 30, ministro de Estado y camarista.
Hijo de Pedro Llambi, español, y de Jacinta Basualdo, porteña, vió la primera luz en Montevideo el 16 de abril de 1788.
Era todavía mozo y figuraba ya en las filas de los voluntarios patriotas, pero en el curso de las alternativas de la lucha, que se suscitaron más tarde, pasó a Buenos Aires donde hizo estudios de jurisprudencia hasta recibir grado, en posesión del cual volvió a Montevideo para revalidarlo, a fines del año 15.
Asesor del cabildo capitalino por nombramiento de 9 de noviembre del mismo año, aceptó la dominación portuguesa impuesta por la solemnidad de les armas, quedándose en Montevideo. cuando Lecor entró vencedor el 20 de enero de 1817, para figurar luego, en julio de 1821, como diputado por extramuros en el llamado Congreso Cisplatino, que anexó la Provincia Oriental al reino unido de Portugal, Brasil y Algarves, bajo el cetro de Juan VI.
Consciente tal vez de la grave responsabilidad que contraía ante la historia fundó su voto anexionista en la imposibilidad de que la Provincia, que había perdido la cuarta parte de su población, pudiera defenderse, sin el respaldo de los portugueses, de una invasión asoladora del caudillo entrerriano Francisco Ramírez, que tenía como inminente. Su discurso, que siguió a las palabras de Gerónimo Pio Bianqui, y el pronunciado luego por Larrañaga, fueron los únicos.
Pensaba por lo demás, como muchísima gente respetable y altamente colocada de la época, que se estaba en presencia de una situación necesariamente provisional, y si
