Página:Figuras americanas.djvu/37

De Wikisource, la biblioteca libre.
Esta página ha sido corregida

— 25 —

lógica irrebatible, se ve y se admira en sus versos que pueden saborearse hoy con tanto deleite como cuando los produjo. Son de los que no envejecen, pues planteaba y resolvía problemas que no son de un pueblo ni de un siglo, sino de todos los países y de todas las generaciones.

En prueba de ello, vamos á copiar algunas de sus Redondillas contra las injusticias de los hombres al hablar de las mujeres:

 Hombres necios que acusáis
A la mujer sin razón,
¿No veis que sois la ocasión
De lo mismo que culpáis?
Si con ansia sin igual
Solicitáis su desdén,
¿Por qué queréis que obren bien
Si las incitáis al mal?
......................................
¿Qué humor puede ser más raro
Que el que, falto de consejo,
Empaña él mismo el espejo
Y siente que no esté claro?
......................................
Opinión ninguna gana
Pues la que más se recata,
Si no os admite es ingrata,
Y si os admite es tirana.
......................................
¿Cuál mayor culpa ha tenido
En una pasión errada?
¿La que cae de rogada
O el que ruega de caído?
¿O cuál es más de culpar,
Aunque cualquiera mal haga,
La que peca por la paga
O el que paga por pecar?
......................................
Dejad de solicitar,
Y después con más razón
Acusaréis la afición
De la que os fuere á rogar.

La joven poetisa tuvo la desgracia de perder su novio, muerto poco antes de la fecha fijada para el casamiento;