do en capelina según el sitio y extensión de la lesión (láminas 80 á 94).
Las fracturas de la columna vertebral se producen por la caída de grandes pesos sobre la espina dorsal (espinazo), ó, indirectamente, cayendo sobre los pies, las rodillas, etc. Generalmente hay insensibilidad y parálisis de los miembros inferiores; así, no podrá moverse, y nunca deben sentarlo. Se traslada, poniendo al caído estirado sobre una camilla dura (postigo, tabla, etc.); debiendo llamar al médico en seguida, porque es una fractura gravísima.
Las fracturas del sacro y de la pelvis suceden rarísima vez y se distinguen por el intenso dolor localizado en estas regiones. Debe hacerse un vendaje alrededor de la cadera; inmovilizar las piernas y transportarse horizontalmente, y mantener en reposo al paciente, como en las fracturas de la columna vertebral.
Desde el primer momento se enseñará á vendar las contusiones, entorsis, luxaciones y fracturas con un pañuelo triangular, que es la venda más fácil de conseguir.
Se estudiará nuevamente en este capítulo los huesos y articulaciones para saber proceder en los casos de entorsis, luxaciones y fracturas.
Se harán estos ejercicios prácticos sobre los mismos alumnos, y éstos entre sí, hasta poder hacer vendajes, rápida y correctamente.
Estimular la inventiva para improvisar auxilios en las situaciones más variadas y poder contestar á las preguntas siguientes:—¿Cómo se procede á examinar una persona caída?—¿Cuáles son los auxilios más urgentes?—¿Cómo se interpretan los diversos signos?—¿Qué signos y peligros tienen las contusiones y qué auxilios se prestan según los casos?—¿Cómo se distingue la entorsis de la luxación y qhace en cada caso?—¿Cómo se