Página:Hablemos francamente sobre el castigo físico de los niños.pdf/9

De Wikisource, la biblioteca libre.
Esta página ha sido corregida
Los niños deben ser guiados hacia las prácticas honorables mediante el estímulo y el razonamiento y sin duda alguna no se lo debe hacer mediante los golpes y el maltrato.
Plutarco, entre los años 46 al 120 después de Cristo, “La educación de los niños,” Volumen I, Moralia, Grecia antigua
Cuando se les pega a los niños, el dolor o el miedo a menudo tienen un resultado del que no es agradable hablar, y es probable que posteriormente sea una fuente de vergüenza, la cual turba y deprime la mente y lleva a que el niño rechace la luz del día y que odie la luz... No dedicaré más tiempo a este asunto. Ya sabemos lo suficiente al respecto.
Quintiliano, alrededor del 35 al 95 después de Cristo, Principios de la oratoria, Roma antigua.
preguntas y respuestas

P: ¿Qué tienen en común todos los delincuentes juveniles?

R: Que han sido criados por personas que les pegaban.


P: ¿Qué tuvo en común la niñez de Hitler, Stalin, Pol Pot, Saddam Hussein y Charles Manson?

R: Que cuando cada uno de ellos era niño fue castigado físicamente con despiado y severidad.


P: ¿Qué tienen en común todos los delincuentes condenados a muerte?

R: Muchas palizas en la niñez.


P: ¿Qué tienen en común los violadores, los incendiarios, los terroristas, los torturadores, los asesinos en serie, los asesinos en masa, los asesinos sexuales, los que ponen bombas múltiples veces, los secuestradores, los francotiradores, los asesinos, los atracadores, los que envenenan los productos del supermercado, los vándalos y los acechadores?

R: Crecieron en la violencia.


P: ¿Qué niño nunca estará destinado a unirse a las personas que cometen delitos graves?

R: Los que han sido criados con amor en lugar de azotes.


P: ¿Qué se debe hacer para convertir a un cachorro amigable en un perro guardián feroz?

R: Limitarle el movimiento y azotarlo a menudo.

cómo es que usted puede influir positivamente para hacer el cambio?

Hay personas en su comunidad que nunca han escuchado las ideas expresadas en Hablemos francamente sobre el castigo físico de los niños. Ya ha llegado la hora de que las escuchen, ¿No lo cree?

Puede ayudar a plantar las semillas para que la próxima generación sea más humanitaria, más cooperativa y menos violenta, compartiendo esta publicación con los demás: sus amigos, vecinos, parientes, los padres de los amigos de sus hijos, los dirigentes de la comunidad, los religiosos, los maestros de sus hijos y sus representantes en el gobierno. Creemos que todos deberían escuchar este mensaje.

Sabemos que algunas personas de su comunidad rechazarán nuestras conclusiones sobre el pegarles a los niños. Algunas personas se negarán a hablar del tema o hasta se molestarán o se mostrarán hostiles ya que esta información los hace sentir muy incómodos. Esto no debe desalentarnos ni a nosostros ni a ustedes. Hay otras personas que desean saber la razón por la cual este método antiguo y familiar para educar a los niños funciona tan mal. También existen aquellos que están educando a sus hijos sin violencia que necesitan una reafirmación de que van por el camino correcto. Su papel es llegar a estas personas y mostrarles lo que usted sabe de este tema. La manera más fácil de hacerlo es dándoles una copia de este folleto.