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PATAGONIA.

silio Villarino que remontase el cur- so del rio para buscar un paso há- eia el Ckile por el rio de Mendoza, que se suponiaseruno de los afluen- tes del Rio-Negro ; pero esta espío- ración interesante bajo el punto de vista jeográñco no produjo ningún resultado material para la colonia del Carmen (1). Todo iba á gusto de los colonos del Rio-Negro , cuando Juan de la Piedra , nombrado en 1784 coman- danta de aquella población , tuvo la loca idea de hacer la guerra á las naciones indíjenas, y atacó al caci- que , cuya alianza con los Españoles nabia favorecido hasta entonces el progreso del establecimiento. La re- ducida tropa de Piedra cometió en esta desgraciada campaña un rigor nada á prbpósito contra los salvajes aue eran victimas de él; mas no tar- aron estos en desquitarse, tanto qe los compañeros de Hedra tu- vieron que replegarse hacia Buenos- Aires. Apesar de esto se mantuvo la colonia , gracias á las fuerzas que el gobierno español mantenía en aquel punto. El comercio llegó á ser tam- bién muy activo por un efecto de la abundancia de sal recojida en las cercanías de la población. La colonia de San José fué mas desgraciada. Parece que la conducta imprudente de un gobernador espa- ñol causó su ruina cuando comen- zaba á prosperar tanto como la del Rio-Negro , y que contaba ya veinte mil cabezas de ganado. Escritor hay que dice recordar aquella catástrofe en pequeño las vísperas sicilianas. Segim relación de uno de los tres Españoles que escaparon de las ma- nos de los salvajes, habiéndose reu- nido muchas tribus de Patagones marcharon óontra la colonia , acam- paron en las cercanías , y un dia de nesta , mientras que todos los habi- (i) Mr. de Orbignt posee el manuscrito ori- jioal é inédito de este yiaje en lo interior del con> tíoeote atnerieano. Asegura que tiene un gran carácter de verdad j exactitud , lo cual le permi- tirá hacer uso de ¿1 para la parte jeográBca da au obra. La publicación de la|i obserTaciones de Villarino será de un gran socorro para lo deli- neado del curso del ftio-N«gro j de algunos da aua afluentes sobre los mapas de la estrwnidad dc' la América. PAT agonía ( Cuaderno 3 J tantes de la población estaban sin armas oyendo misa en la capilla , les cercaron , acometieron y degollaron. Los tres ünicos que se salvaron de tan horrible carnicería debieron su vida á la amistad que tenian con al- gunos Indios. La colonia fué ente- ramente destruida, las casas que- madas y una gran parte de los gana- dos arrebatada. La pk)blacion del Carmen estaba como destinada á ser una mazmora. Hacía el año 1809 , en el momento en que los criollos de Buenos- Aires comenzaron el movimiento insur- reccional que produjo su emancipa- ción de la monarqu/á'española , cin- co de los patriotas mas decididos valientes fueron desterrados á Pata- gón ia por el virey Limiers. Los ejemplos de semejantes deportacio- nes por causa política serenovaron después con mucha frecuencia, y esto contribuyó mas á exasperar los ánimos. Como todo lo que nos resta decir es relativo al Carmen, antes de pa- sar adelante creemos oportuno na- cer una descripción de aquel estable- cimiento. Descripción de la población del Carmen, Está situada en la línea que, según la mayor parte de losjeógrafos, separa la Patagonia del territorio de Buenos-Aires ; es decir, cerca del 41** de latitud austral y por 64°45' de lonjitud oeste de Paris. La po- blación se levanta en la márjen del Rio-Negro, dominada y protejida por un fuerte de forma cuadrada ue domina las cercanías y el (íurso el rio acierta distancia del pueblo. Aunque situado á seis leguas de la embocadura del rio, este estableci- niiento, es elünico que ha qued ado en Eié en las costas de la Patagonia ; los uques, aun los de muchas tonela- das, llegan muy cerca y fondean con seguridad en aeuas muy tranquilas y profundas. El aspecto del Carmen es agreste y pintoresco. Los sauces que sombrean las orillas del Rio- Negro, los terrenos de aluvión, que por ambos lados presentan una lar- ^a banda de verdor , los altos acan- tilados ó tajadas rocas que de dis- tancia en distancia levantan sus p«.