Página:Historia de un amor turbio - Los perseguidos (1908).pdf/161

De Wikisource, la biblioteca libre.
Esta página no ha sido corregida
161
Historia de un amor turbio

za y la besó con apasionada, honda y seria pasión. A cada expresión de intimo cariño de él, Eglé se estrechaba más, conteniendo sus sollozos por fin—á duras penas. Rohan, en sus incesantes besos, sentía sus mejillas mojadas por las de ella, y el enternecimiento sin par de que las lágrimas eran provocadas por él, ceñiale la garganta en un nudo de oprimida piedad. Tanto dijo y tanto hizo que al fin Eglé se sonrió.

—Que no vuelva esto!

—No, jamás ! Hacerte sufrir así.... y adorándose á través de sus ojos húmedos, concluían en una rendida dicha de cabezas recostadas. Pero á pesar de todo Eglé había sufrido demasiado para no quedar agotada el resto de la noche.

11