IMPRESIONES DEL DOS DE MAYO 313
Tomada posesion del hospital, la superiora me destinó á ayudar á la hermana boticaria en la confeccion de vendas y apósitos. Arreglamos para ello un gran salon pavimentado con madera, y nos entregamos á esa triste ocupacion no sin dolorosas reflexiones, que la una ocultaba obedeciendo á la regla, la otra al largo hábito de sufrir.
No de allí 4 mucho llegó un gran refuerzo de colaboradoras. Las señoritas B....y Hortencia, la linda hija del malogrado artista D. .. se presentaron en nuestra improvisada oficina, y apoderándose de telas y ungiientos, en un momento dieron cima á la obra, dejando alineados tendales de emplastos, de vendas y de compresas.
Preparados los socorros de la ciencia, la hermana boticaria pensó en los del cielo. Fué á buscar una caja de medallas de la Vírgen y me ordenó enlazarlas, para ser repartidas entre los combatientes.
Entregada estaba á esa ocupacion, cuando los bomberos de Lima, que con los otros dos cuerpos habian estado en ejercicio, invadieron el salon, señalado por error para alojarlos.
Aunque admirados de encontrar en su vivac aquella mezcla de pócimas, de monjas y seglares, no se desconcertaron por ello. Echaron abajo sus sacos de noche, de donde en vez de sábanas comenzaron á salir pollos, jamones y toda suerte de fiambres,