Página:La señal de los cuatro - Arthur Conan Doyle (1909).pdf/26

De Wikisource, la biblioteca libre.
Esta página no ha sido corregida
— 28 —

se me dijo que el capitán Morstan se había alojado allí, pero desde la noche anterior no había vuelto. Esperé todo el día, sin recibir la menor noticia de él: á la noche siguiente, por consejo del dueño del hotel, comuniqué á la policía lo que ocurría, y, al día siguiente, pusimos avisos en todos los diarios. Ningún resultado tuvieron nuestras averiguaciones, y hasta el día de hoy no he sabido una sola palabra de mi infortunado padre. Había venido de la India con el corazón lleno de esperanza, deseoso de encontrar tranquilidad, alivio, y en vez de eso... Se Ilevó la mano á la garganta, y un ahogado sollozo puso fin á la frase.

—¿La fecha?—preguntó Holmes, abriendo su libro de apuntes.

La desaparición ocurrió el 3 de diciembre de 1878, hace unos diez años.

—¿Su equipaje?

—Se quedó en el hotel. Nada había en él que pudiera servir de clave; algunas ropas, algunos libros, y una considerable cantidad de curiosidades de las islas Andaman, en las que había estado, con otros oficiales, encargado de la custodia de los presidiarios.

—¿Tenía algunos amigos en Londres?

—Solamente sabía yo de uno; el mayor Sholto, de su misme regimiento, del 34 de infantería