pendiculares a la dirección del movimiento de S' relativamente a S, podemos escribir:
Entonces obtenemos:
Estas son las fórmulas fundamentales de la dinámica de Einstein.
La conexión entre fuerza y aceleración producida es, pues, otra, según que la fuerza actúe en la dirección del movimiento, o en dirección perpendicular a él.
Suélense reducir estas fórmulas a una forma en que se parezcan lo mas posible a la ley fundamental de la dinámica clásica. Para ello se ponen:
dos magnitudes que se designan con el nombre de masa longitudinal y masa transversal; entonces puede escribirse:
que coincide por la forma con la ley fundamental [7] de la mecánica ordinaria (II, 10, pág. 48).
Se ve aquí lo necesario que es definir desde el principio el concepto de masa exclusivamente por la resistencia de inercia; no sería posible de otro modo emplearlo en la mecánica relativista, pues para fuerzas longitudinales y transversales hay que tener en cuenta diferentes masas, y éstas no son, además, constantes características del cuerpo, sino que dependen de su velocidad. El concepto relativista de masa aléjase, pues, mucho del uso común del idioma, en el que masa significa algo así como cantidad de materia. Una medida de ésta es, en cierto modo, la masa en reposo m0; pero ésta no es tampoco, como en