Página:La vida es sueño.djvu/77

De Wikisource, la biblioteca libre.
Esta página ha sido corregida
73
LA VIDA ES SUEÑO

Huye en él, que yo, entre tanto, te guardaré las espaldas.

BAS. Si está de Dios que yo muera, o si la muerte me aguarda
Aquí, hoy la quiero buscar, esperando cara á cara.

(Tocan al arma.)



ESCENA XIV

 

Segismundo. Estrella. Rosaura. Soldados. Acompañamiento. Basilio.
Astolfo. Clotaldo.


UN SOLDADO. En lo intrincado del monte, entre sus espesas ramas.
El Rey se esconde.

SEGIS. ¡Seguidle! No quede en sus cumbres planta
Que no examine el cuidado, tronco á tronco y rama á rama.

CLOT. !Huye, Señor!

BAS. ¿Para qué?

AST. ¿Qué intentas?

BAS. Astolfo, aparta.

CLOT. ¿Qué quieres?

BAS. Hacer, Clotaldo, un remedio que me falta.
— Si á mí buscándome vas, (A Segismundo.) ya estoy, Príncipe,
á tus plantas:
(Arrodillándose.) Sea dellas blanca alfombra esta nieve de mis canas
Pisa mi cerviz, y huella mi corona; postra, arrastra
Mi decoro y mi respeto; toma de mi honor venganza;
Sírvete de mi cautivo, y tras prevenciones tantas.
Cumpla el hado su homenage, cumpla el cielo su palabra.

SEGIS. Corte ilustre de Polonia, que de admiraciones tantas
Sois testigos, atended, que vuestro Príncipe os habla
Lo que está determinado del cielo, y, en azul tabla
Dios con el dedo escribió, de quien son cifras y estampas
Tantos papeles azules que adornan letras doradas.
Nunca engaña, nunca miente; porque quien miente y engaña
Es quien, para usar mal dellas, las penetra y las alcanza.
Mi padre, que está presente, por excusarse á la saña
De mi condición, me hizo un bruto, una fiera humana.
De suerte que, cuando yo por mi nobleza gallarda.
Por mi sangre generosa, por mi condición bizarra,
Hubiera nacido dócil y humilde, sólo bastara
Tal género de vivir, tal linaje de crianza,