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LAS RUINAS PREHISPÁNICAS DE EL ALFARCITO

Las piezas que llevan los números 22.906 y 22.907 fueron, como se ha dicho, descubiertas aisladamente en el yacimiento 4. La primera es (fig. 16) una especie de bastón cilíndrico, arqueado, de 38 centímetros de longitud; está muy deteriorado pero es posible aún distinguir, en un extremo, un ensanchamiento de la pieza a modo de espátula, con un ligero filo. Posiblemente fue un instrumento de agricultura, cuya forma es harto conocida en nuestra arqueología del noroeste. Durante las excavaciones en La Paya, en el valle Calchaquí, descubrimos con el doctor Ambrosetti 25 sepulcros que contenían estos objetos de madera [1]; Lehmann-Nitsche, a su vez, describe un ejemplar, clasificado como «madero para tejer»[2], exhumado del cementerio VIII de Casabindo, y Boman[3] consigna varios ejemplares descubiertos en Morohuasi (Salta), Suyate (Jujuy) Pucará de Rinconada (Jujuy) y en Calama[4]. Las exploraciones en el Pucará de Tilcara permitieron descubrir abundantes ejemplares análogos.

  1. J. B. Ambrossetti, Exploraciones arqueológicas en la ciudad prehistórica de La Paya (valle Calchaquí, provincia de Salta), Facultad de Filosofía y Letras. Publicaciones de la Sección Antropológica, número 3, página 452, figura 235. Buenos Aires, 1907. El doctor Ambrosetti rectifica en esta obra la hipótesis que enunciara con anterioridad sobre el presunto uso de estos instrumentos, rechazando, por razones atendibles, la suposición de que fueron boomerangs, e inclinándose a creer que han sido utensilios de agricultura y que, en ciertos casos, pudieron usarse como armas de combate. La opinión hoy generalizada, después de las observaciones anotadas por muchos autores, es que dichos objetos han tenido aplicación en tareas agrícolas, lo cual no excluye que hayan podido tener otro uso de orden secundario.
  2. R. Lehmann-Nitsche. Catálogo de las antigüedades de la provincia de Jujuy conservadas en el Museo de La Plata, en Revista del Museo de La Plata, tomo XI, página 108, lámina IV, H, 5. La Plata, 1904.
  3. E. Boman, Antiquités de la région andine de la Republique Argentiné et du désert d'Atacama, tomo I, página 335, figuras 74 b, c y e; tomo II, páginas 589, 590, 619 y 733 y figuras 121 a y b, 137 c, 168 b y 169 f. Buenos Aires, MDCCCCVIII.
  4. Comparto la opinión expresada del señor Boman sobre la distinta aplicación de los objetos de madera que me ocupan. Los de pequeñas dimensiones, que son también abundantes, deben haber sido utilizados en los pequeños telares donde se fabricaban vinchas, fajas, etc., es decir, tejidos angostos. Se diferencian de los de dimensiones mayores, cuyo uso fué común en las tareas agrícolas, por su forma general, mango, filo y corvadura. Uno de los más hermosos ejemplares que puedo citar se encuentra actualmente en el Museo etnográfico de la Facultad de Filosofía y Letras, catalogado bajo el número 18.453; perteneció a la colección del doctor Luis Montt y fué descubierto en el puerto Caldera, departa-