Página:Las vidas paralelas de Plutarco - Tomo IV (1880).pdf/216

De Wikisource, la biblioteca libre.
Esta página no ha sido corregida
218
Plutarco.—Las vidas paralelas.

que á Porcia, su hija, casada ya con Bibulo, á quien habia dado dos hijos, se la otorgase á él mismo en mujer, para tener en ella como en terreno de sobresaliente calidad una noble descendencia; pues aunque esto en la opinion de los hombres fuese repugnante y extraño, por naturaleza era honesto y político que una mujer en buena y robusta edad no tuviese su fertilidad ociosa dejándola apagarse; ni tampoco diese á luz más hijos de los que convenian, atropellando y empobreciendo con el número al que ya no los habia menester; á lo que añadia, que comunicándose las sucesiones entre los varones aventajados, la virtud se extenderia más pasando á los hijos, y la república se fortificaria por medio de las multiplicadas afinidades; y si Bibulo estaba tan bien hallado con su mujer, él se la restituiria despues de haber parido, cuando ya se hubiese he cho una cosa más propia con el mismo Bibulo y con Caton por la comunion de los hijos. Respondiéndole Caton que apreciaba mucho á Hortensio, y que vendria gustoso en contraer deudo con él; pero que tenía por muy repugnante el que se hablara en el matrimonio de una hija dada ya á otro, mudó éste de obsequio, y no tuvo inconveniente en declararle que le pedia su propia mujer, jóven todavía, para procrear hijos cuando ya Caton tenía sucesion bastante. Y no hay que decir que á esto se movió por saber que Caton estaba desviado de Marcia, pues suponen que se hallaba á la sazon en cinta. Caton, pues, viendo este empeño y este deseo de Hortensio, no le dió repulsa, y sólo le respondió que era preciso conviniese en ello Filipo, padre de Marcia.

Pasaron á hablarle, y propuesta que le fué la traslacion, no vino en que se desposase Marcia de otro modo que hallándose presente Caton y consintiendo en los desposorios.

Aunque estas cosas tuvieron lugar mucho más adelante, me ha parecido anticiparlas con motivo de haber hablado de las mujeres.

Muerto Lentulo y sus correos, como César se acogiese