perimentos de óptica en nuestros laboratorios terrestres, el movimiento de traslación de la Tierra 2. En virtud de nuestras observaciones, los fenómenos electrodinámicos del laboratorio se pueden explicar tanto suponiendo la Tierra en reposo como en movimiento; ambas hipótesis están igualmente autorizadas.
Con esto se llega a la convicción absoluta de que para todos los fenómenos existe un principio de Relatividad, sean ellos mecánicos o electrodinámicos. Pero tal principio debe ser único y no haber uno para la Mecánica y otro para la Electrodinámica; pues si hubiese dos principios, en su acción recíproca se anularían, puesto que de ellos se podría derivar, en asuntos en los cuales aparecieran reunidos fenómenos mecánicos y electrodinámicos, un sistema privilegiado con respecto al cual tendría sentido hablar simultáneamente de reposo absoluto y de movimiento.
Un recurso había para salir de esta dificultad, que es el adoptado por Einstein. Hay que establecer, en lugar del principio de Relatividad de Galileo-Newton, uno nuevo que abarque los fenómenos de la Mecánica y Electrodinámica. Esto puede realizarse, sin alteración del postulado de Relatividad antes formulado, estableciendo un nuevo grupo de transformaciones, las cuales relacionen entre sí las coordenadas referidas a sistemas igualmente autorizados. Ciertamente es preciso, luego, que sean transformadas también las ecuaciones fundamentales de la Mecánica de modo que ellas conserven su forma al efectuar una tal transformación. De elementos para esta nueva formación ya disponemos. A saber, se había hallado empíricamente que las ecuaciones fundamentales de la Electrodinámica de Lorentz