del dinero invertido, pero como él no tiene ningún guardia sobre los sirvientes indios no sabe cuánto reciben y probablemente es engañado de cuatro quintas partes de la recaudación real de las ventas.
Señor Cañedo nos acompañó, quien ha viajado en los Estados Unidos y tiene algunas ideas prácticas excelentes, junto con un grado de patriotismo de que lo llevó a luchar valientemente contra los franceses, salió de la Guerra con múltiples heridas honorables, y nos dio mucha información valiosa en relación con el país y sus productos. Nos dijo que el café que vimos fue de la mejor variedad cultivada en Colima. Este café se vende fácilmente en casa, y excepto como curiosidad, rara vez es enviado al extranjero. Los granos más selectos se cosechan a mano, y se venden al buen precio de un dólar y veinticinco centavos en moneda y las bayas ordinarias, realmente muy buena para uso familiar, en veinticinco centavos. Si él pudiera estar seguro de conseguir incluso veinte centavos de dólar por libra neto, en San Francisco, él se comprometería a suministrar cualquier cantidad en pocos años. El grano es redondo y blanco, y el sabor igual si no superior a ese de Mocha. Sólo unas 40,000 o 50,000 libras se producen anualmente en Colima, pero la cantidad podría aumentar indefinidamente.
Aceite de coco, producido a partir del pequeño coco redondo, llamado "Cochita" como del tamaño de una nuez de Carya, no el coco ordinario, también se produce en cantidad considerable. En Manzanillo vale unos 17 dólares, moneda, barril.
De frutas tropicales, Colima—el estado en general—es capaz de producir cantidades ilimitadas, y con buenas carreteras a Manzanillo, y un mercado extranjero, un inmenso comercio podría pronto desarrollarse.
Cacao—se pronuncia cacao—o la semilla del chocolate se produce en toda
