en él en que no se proponga un fin. Cualquiera que sea la cosa que quiere hacer, jamas emprenderá nada que sea superior á sus fuerzas, porque las tiene bien esperimentadas y las conoce: sus medios son siempre adecuados á sus planes, y raramente obrará sin estar seguro del feliz éxito de lo que pretende. Sus ojos tendrán atencion y discernimiento; no irá neciamente preguntando á los demas acerca de lo que vé, sino que lo examinará por sí mismo, y se fatigará por hallar lo que quiere aprender ántes de pedirlo. Si se halla en un apuro, se turbará menos que otro; y si hay peligro, tambien se asustará menos. Como su imaginacion está todavía sin ejercitarse, y nada se ha hecho para animarla, no vé las cosas sino como son en sí; no estima los peligros en mas de lo que valen, y conserva siempre su serenidad. Frecuentemente se agrava sobre él la necesidad para que aun choque contra ella: desde su nacimiento lleva su yugo, y por lo mismo vedle bien acostumbrado á él; en fin, está siempre dispuesto á todo.
Bien se ocupe ó se divierta, una y otra cosa es igual para él: sus juegos son sus ocupaciones, y no conoce entre ámbas cosas