prepara sus máquinas para dañar á los demas.
Es necesario estudiar la sociedad por los hombres, y no los hombres por la sociedad; los que quieran tratar separadamente la política y la moral, jamas comprenderán ninguna de las dos. Dedicandose desde luego á las relaciones primitivas, se vé como deben ser afectados los hombres, y que pasiones deben nacer. Se vé que recíprocamente por el progreso de las pasiones estas relaciones se multiplican y se estrechan. La moderacion de los corazones hace á los hombres independientes y libres, mas bien que la fuerza de los brazos. Cualquiera que desea pocas cosas, depende de pocas personas; pero confundiendo nuestros vanos deseos con nuestras necesidades físicas, los que han hecho de estas últimas los fundamentos de la sociedad humana, han tomado siempre los efectos por las causas, y no han hecho otra cosa que estraviarse en sus razonamientos.
No hay conocimiento moral que no pueda adquirirse por la esperiencia de otro, ó por la de uno mismo. En el caso en que es peligrosa esta esperiencia, en vez de hacerla uno mismo, se saca su leccion de la historia.