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Página:Poesías de don Mariano Melgar (1878).pdf/145

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Repite su balar la gorda vaca.
¡Que gusto es ver huirse las abejas
Luego que la humareda las espanta,
Y quedan descubiertas sus celdillas
Cuando el dulce panal de ellas se saca!
Cada estacion ofrece sus delicias,
Y el campo en todos tiempos así agrada:
Adórnase con flores el vorano,
El otoño con frutas nos regala,
Se dora con las mieses el estío,
Y en invierno halagan las fogatas.
En tiempo coge la uva el viñatero,
Y el mosto hace correr bajo sus plantas;
Otro tiempo de yerba hace manojos,
Y con ralo azadon la tierra escarba.
Tú mismo puedes en cercados huertos
Poner legumbres, y ordenar las plantas;
Tú mismo puedes á tus sementeras
Tornar los claros arroyuelos de agua;
Y cuando venga de ingertar el tiempo,
Acomoda una rama á otra rama;
Para que sea gusto ver el árbol
Adornado quedar de ojas extrañas.
Luego que este recreo te posea,
Amor se irá volando en torpes alas.
Puedes tambien cazar, que muchas veces
Huyó Venus vencida de Diana:
Á la liebre veloz con perros sigue,
O en la cumbre del monté redes arma;
Ora atraviesa y rinde jabalíes,
Ora á los siervos tímidos espanta;
Que por la noche fatigado el cuerpo,