resplandece con ostentación de oficinas y claustros altos y bajos de mucha elegancia y esmero de arquitectura: en que son habituales el guardián, doctrinero, coadjutor y otros ministros religiosos; por cuyo cuidado y desvelo esmerado corre la administración de almas de aquellos indios, que logran frecuente el pasto y comercio espiritual, como todas las otras que están administradas y regidas por esta seráfica familia; y así resalta su vigilancia en lo que se ve de esmerados adornos que ilustran y hermosean este maravilloso templo. De todo el agregado de este templo y sacristía de éste y otros conventos de San Francisco, se verá brevemente cumplida, docta, esmerada y curiosa relación en la Crónica que de esta edificativa y santa familia de Goathemala está para imprimirse, escrita por el padre lector jubilado fray Francisco Vázquez, sujeto que puede, con razón, ocupar todo el eco sonoro de la fama, llenando con la suavidad de su trompa en su merecido elogio, aun más allá de la gloriosa esfera española, por la claridad de sus virtudes, suavidad y blandura de su trato, complemento lucido de todo género de letras, prendas singulares de púlpito y ingenuidad de sus palabras; cuyo crédito suyo, en la verdad de su historia, me excusa (aunque no del todo) de decir cuanto bueno con verdad notoria y acreditada siento de esta apostólica, ejemplar, esclarecida familia; pues para ella sola y los venerables varones que en el discurso de más de ciento cincuenta años de su fundación en esta ciudad han florecido con maravilloso y singular ejemplo de admirables virtudes, tomo muy crecido aun no bastara.
Todo este dilatado y fecunda valle goza de la provisión de las abundantes aguas que ministra y ofrece el copioso y noble río de la Magdalena, llamado de la lengua pipil Guacalat, que corresponde á Guacal de agua, mas con poca razón según la esfera de su lleno; siendo uno de los excelentes ríos que corren á la costa del Sur con abundante curso, y que para el frecuente y diario tránsito necesita de una elegante puente que tiene á la salida del pueblo; con otro excelente río que llaman del Molino, posesión que fué