aunque las opiniones se inclinaban más en favor de este último.
Uspantán, pág. 137, I.—Pueblo de la parroquia de Sacapulas en el distrito de Gueguetenango, provincia de Totonicapán, y uno de los nueve que se sublevaron durante el corto y torpe mando en Guatemala del visitador Francisco de Orduña; rebelión que apaciguó D. Pedro de Alvarado al regresar de España y encargarse de aquella gobernación en 1530.
Utatlán, págs. 19, 20, 23, 24, 26, 47, 48, 53 á 56, 59, 60, 75, 123, 148, 149, 152, 157, 317, I; 155, II.—La gran ciudad de Utatlán, repoblada por los españoles con el nombre de Santa Cruz del Quiché y comprendida en el partido de Sololá de la provincia del mismo nombre, fué capital del reino de los Quicheles desde que el rey Axopil hizo el reparto de sus dominios, designándole al primer hijo, Jiutemal, el Cachiquel, y al segundo, Axícnat, el Zutujil. A la muerte del padre heredó Jiutemal á Utatlán, que engrandeció, y él se rodeó de todos los ostentosos atributos de la soberanía: en aquella corte recibió é hizo salir de ella en el término de un día á los embajadores del Emperador de Mexico Ahuitzol, y desde ella envió poderosos ejércitos contra Alvarado al saber la invasión de los españoles; ejércitos que éstos pusieron en fuga en las barrancas de Olimtepeque y trataron de la paz en Quetzaltenango, reconociéndose el rey Sequechul vasallo del Rey de España, y entregando en consecuencia dos mil de sus súbditos para que, como conocedores del terreno, acompañasen al caudillo español á la conquista de Guatemala ó del reino de Cachiquel. Sojuzgado fué éste y su rey Sinacam; pero á poco, en 1526, se levantó contra los españoles, enviando embajadores á Sequechul para que secundase el movimiento, como lo hizo. Presos ambos en la batalla del Volcán continuaron en prisiones hasta que en 1540, al embarcarse Alvarado en Acaxutla para emprender la jornada á la Especería, los llevó consigo para evitar que su presencia pudiera ser bandera de