varado, para que se encomendase la gobernación á su viuda D.ª Beatriz de la Cueva. Fué Marroquín segundo alcalde ordinario de Guatemala en 1545 y 1550.
Marroquín (D. Francisco), págs. 128, 145, 146, 156, 165, 173, 174, 179, 195 á 198, 203, 219, 220, I.—Natural del Valle de Toranzo en Santander, fué maestro de filosofía y teología en Osma, y hallándose en la corte del Emperador Carlos V, conoció á D. Pedro de Alvarado, con quien pasó á Indias en 1528; asistió en la Veracruz á los últimos momentos de la esposa del conquistador D.ª Francisca de la Cueva, que murió allí en febrero de 1529; pasó con Alvarado á Mexico y luego á Guatemala en 1530, donde entró con el carácter de cura de la capital, provisor y vicario general de la provincia, y se posesionó en 3 de junio. En 1533 presentó el Emperador á Marroquín para el Obispado de Guatemala, recibió el interesado las cédulas en 2 de marzo de 1535, le consagró en Mexico el año de 1537 D. Juan de Zumárraga, y encargado de la diócesis la organizó en la forma más provechosa á los naturales indios y al brillo del culto.
No sólo capellán, sino consejero y amigo predilecto de de Alvarado fué el ilustre Marroquín, tanto, que no teniendo ánimos para testar el conquistador, cuando el triste suceso de Nochistlán, dispuso que testaran por él su hermano Juan y el Obispo de Guatemala. Al recibirse en esta ciudad la noticia de aquel suceso y encargarse la gobernación á la viuda del Adelantado y luego á su hermano D. Francisco de la Cueva, se nombró al Obispo su adjunto; y dos días después, durante la pavorosa inundación que arruinó aquella capital, recorrió las calles prestando auxilios de todo género á los atribulados habitantes, dispuso y coadyuvó al entierro de las muchas víctimas del desastre, dándose sepultura á la gobernadora D.ª Beatriz en la catedral que él erigió con fondos de la ciudad el 23 de agosto de 1533. Al fundarse la segunda Guatemala, levantóse á costa de Marroquín la nueva catedral, que permanció hasta 1669 que fué preciso