tad, viua el rey!; y ansi dando grandes bozes lo di- xeron. Y acabado de dezir, la gente se indigno contra el gouernador, y muchos dezian: ¡pese a tal! ; vámosle d matar a este tyrano que nos que- ría matar y destruyr ; y amansada la 3a*a y furor de la gente, luego los oficiales nombraron por te- niente de gouernador y capitán general de la dicha prouincia a Domingo de Yrala. Este fue otra vez gouernador contra Francisco Ruyz, que auia que- dado en la tierra por teniente de don Pedro de Men- doza, y en la verdad fue buen teniente y buen go- uernador, ^ por cmbidia y malicia le desposseye- ron contra todo derecho y nombraron por tenien- te a este Domingo de Yrala. Y diziendo vno al veedor Alonso Cabrera que lo auian hecho mal, porque auiendo poblado el Francisco Ruyz aque- lla tierra y substentadola con tanto trabajo se lo auian quitado, respondió que porque no queria ■hazer lo que el queria. Y porque Domingo de Yra- la era el de menos calidad de todos y siempre ha- ria lo que el le mandasse, y todos los oficiales por esto lo auian nombrado, y assi pusieron al Domin- go de Yrala y nombraron por alcalde mayor a vn Pero Diaz del Valle, amigo de Domingo de Yrala; dieron las varas de los alguaziles a vn Bartolomé de la Marilla, natural de Trugillo, amigo de Nun- fro de Chaues, y a vn Sancho de Salinas, natural de Caballa. Y luego los oficiales y Domingo de Yrala comen(;aron a publicar que querian tornar a hazer entrada por la misma tierra que el gouer- nador auia descubierto, con intento de buscar al- guna plata y oro en la tierra, porque hallándola la
Página:Relación de los naufragios y comentarios (Tomo I).djvu/384
Apariencia