Página:Relaciones sanas.pdf/22

De Wikisource, la biblioteca libre.
Esta página ha sido corregida

Todos tenemos
una media naranja

–¡Amor, tengo que contarte algo! –gritó Patricio al ver su computador.

–¿Qué pasa? –murmuró Constanza al escuchar aquello.

–¡Quedé! ¡quedé! –gritó nuevamente Patricio mirando a su chica.

–¿Dónde, cariño? –preguntó ella pese a saber a lo que se refería.

–En Informática en Valparaíso –respondió con alegría.

–¡Pero, cariño! ¿vas a irte? –dijo con tristeza.

–Amor, te dije que esto podía pasar –contestó con el rostro tenso.

–Lo sé, cariño… pero también dijiste que yo era tu media naranja y que estaríamos siempre juntos… ¿Acaso ya no me quieres?

–No se trata de eso, Constanza…

23