ellos milite; la responsabilidad que puedan contraer por la parte que en esta publicación tomen, no pasa de la que se origine de los artículos á cuyo pié estampen su firma. No quiere esto decir que la Revista de España sea una colección de opúsculos y de estudios sin principio que la domine, y en la que se encuentren formando un sincretismo bastardo las más contrarias opiniones y doctrinas.
El principio en que concuerdan todos los colaboradores y redactores de la Revista de España, lo que ha de dar cierta unidad á esta obra, es la creencia de cuantos escriben en ella en la marcha progresiva de la humanidad, por donde, sin desconocer las faltas de nuestro siglo, sin hacer pomposos ditirambos de todo lo que forma en conjunto la civilización presente, combatiremos por la ventaja relativa de nuestra edad sobre las anteriores, y por la mayor excelencia y benéfico influjo de las ideas que hoy gobiernan ó están llamadas á gobernar las sociedades humanas.