▼encubriese los crímenes del opresor de Colchagua, cuarenta i seis individuos de los mismos que le reconocieron han confesado el yerro de haberse separado de la parte sana del pueblo, manifestando con enerjía la manera degradante con que se les hizo sufragar, i protestando al mismo tiempo que están encargados de mas de cien individuos para hacer esta misma retractación, que les retiene el terror.
Examine el público imparcial, por el mérito de esta esposicion, si existen realmente los atrepellamientos de que se ha quejado San Fernando i haga justicia a los reclamos de un pueblo que, aunque obediente a las leyes i majistrados, no consentirá jamas el envilecimiento de sus derechos. El ha seguido la marcha misma que el de Santiago, sancionada por la autoridad suprema; i cuando ha visto la inconsecuencia de principios con que se reprueba que ha emprendido, ha entablado por el órden legal el desagravio de su dignidad ultrajada.
Sus reclamos han sido dirijidos en el lenguaje de la súplica; se han tocado todos los medios de conciliacion i solo ha conseguido hasta ahora esta provincia desgraciada el desaire de sus pretensiones i la sanción de sus ultrajes. La conducta del tirano que la oprime no ha variado por esto; ántes bien, prepara los medios de agravar sus cadenas, ocurriendo aun a la de seduccion i alucinamiento [1]. El pueblo sufrirá en silencio; pero esta aparente calma será tal vez la señal de alarma contra su opresor Quintana. El sufrimiento tiene límites, i si éstos se traspasan jamas los pueblos economizan desgracias en el impulso del dolor. Adóptense medidas de prudencia i se habrá prevenido el advenimiento de una crisis tan fatal; óiganse los reclamos i exijencias de los pueblos, i para siempre se alejarán de nosotros los excesos de la desesperación, volverá a los pueblos la tranquilidad i el órden, i se habrán llenado las únicas aspiraciones de la provincia que me ha constituido el órgano de sus votos. —Santiago, Julio 30 de 1825. —Manuel José Cardozo [2].
Núm. 403 [3]
Nada puede serle mas sensible al hombre de bien que verse en la necesidad de tener que publicar sus hechos para contradecir calumnias atroces fraguadas por el crimen a la sombra de la impunidad i el desorden. Yo reposaría tranquilo en la seguridad de mi conciencia, i en buen concepto que me lisonjeo merecer de los que me conocen; pero, cuando el cura Cardozo ha prostituido su carácter i dignidad pastoral, espresándose contra mi persona públicamente con las voces de la intemperancia, indigna aun de aquellos detractores contra quienes hacen estos sacerdotes llover fuego, iras i maldiciones del cielo, i que sus imprecaciones i anatemas son tan venerados i creídos por la multitud, es mi deber defender mi honor i contradecirlos para que se vea la falsedad de sus acertos i para que se conozca que casi jamas el Divino Evanjelio es el norte de sus operaciones. ¡Oh sacerdotes! oh pueblo! ceñios a vuestros deberes, conservareis el órden, sereis felices!
Siento, sí, que al esprimir mis razones me vea en la necesidad de tocar particulares i personas que no quisiera; mas, al presentar la otra mejilla, despues de herido de una, siguiendo las máximas de nuestra santa i admirable relijion, veo la mano armada de un puñal; i sobre todo, nada nos dicen los sagrados estatutos, que solo hablan de las bofetadas llanas i a mano libre. Los hombres sensatos, que miran esta contienda imparcialmente, así como yo, sentirán que nuestros disturbios políticos, el descrédito de la nación, se
- ↑ "Habitantes de Colchagua: "Ya llegó el tiempo de desengañarnos de las mentiras que, para vuestro alucinamiento, hacen correr entre vosotros para arrancaros incautamente las firmas esos lobos devoradores, a quienes tanto conocéis i habéis mantenido por tantos años con vuestro sudor i trabajo. El Director i yo sabemos quiénes han sido sus ajentes i que habéis sido sorprendidos los que habéis firmado; por esto nada temáis, que yo nunca procederé contra vosotros. "Las comunicaciones que el comandante Puga ha traído de Santiago desmienten en un todo las imposturas de que ellos se han valido; el voto público que disteis en esta villa cabecera sin seducción ni fuerza es el que vale; así lo determinó el señor Director, i estad entendidos que solo Valparaíso ha reconocido la Junta, porque su gobernador en una hora citó a los vecinos e hizo el reconocimiento, habiendo sufragado en un pueblo como aquel solo cincuenta i dos individuos. Este ha sido depuesto del empleo por un decreto de la misma Junta. "Por todo lo espuesto habéis conocido que solo aspiro a conservar vuestra quietud i la tranquilidad i que no sean sacrificadas por los ya dichos. Ya podéis andar francamente por los caminos, i dentro de poco tiempo dormiréis tranquilos en vuestras casas con las puertas abiertas, pues todo mi deseo es dejar el partido libre de toda clase de malvados. Así lo promete i cumplirá vuestro amigo. —Quintana."
- ↑ Al concluirse esta impresion se me ha asegurado privadamente que el señor coronel don José María Guzman tiene órden suprema para marchar a San Fernando en clase de delegado a presidir la eleccion de diputados.
- ↑ Este documento ha sido trascrito del volúmen titulado Documentos para la Historia, tomo III, pajina 53, de la Biblioteca Nacional.(Nota del Recopilador.)