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Página:Sesiones de los Cuerpos Lejislativos de Chile - Tomo XI (1824-1825).djvu/368

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368 ASAMBLEA DE DIPUTADOS

Primero es preciso hablar con franqueza Conoce Chile i conoce todo el Universo que el formar Asamblea, i con una voz igual no reconociendo la base de la poblacion es injusto[1]; que, en una palabra, jamas habrá república donde no se observa; así es que esto no solo se ha quedado en proyecto, sino que siempre se ha realizado, i me parece que todos los señores de la Sala sabrán que los poderes formales de Concepcion vienen con la calidad de un Senado Lejislativo, en donde este Senado se componga de diputados en igual número de todas las provincias. Esto es lo que ha tratado Chile, o digo, Santiago de evitar, i por esto es que sin conformarse en reunir Asamblea, ha tratado siempre de formar un Congreso Nacional, i que se instalase i constituyese como tal; pero, prescindiendo de estos motivos, tenemos otros de igual consideracion.

Sabemos que en Europa todos los Estados de América han sido reconocidos i declarados independientes, ménos Chile, i nos consta tambien que ha sido esto porque no estaba constituido, ni tenia un Congreso con quien tratar, i, por consiguiente, nos han apresurado a que de algun modo tengamos un Congreso; pero que cesen los motivos que nos amagan, porque yo sé, por noticias, que la España hace grandes esfuerzos para que se restablezcan las colonias; pero tambien es cierto que a esta Inglaterra mas que a nadie le conviene que las demas naciones tengan colonias, porque consistiendo su principal poder i fuerza en el mar, cualquiera guerra les puede poner la lei por el temor de que no les tome las colonias, i así sabemos que la política de aquella Nacion pierde mucho en el reconocimiento de nuestra independencia, porque pierde la ventaja de tener sujeta a la Europa entera.[2].Ahora, pues, sabiendo que en el Pacífico todos los puntos continentales serán dominados por la adquisicion del archipiélago, en la punta del Cabo de Hornos, está viendo a Chiloé que es el estremo de Chile, i dentro de este país está viendo una desorganizacion por la que se da lugar a las demas naciones i a la misma Inglaterra a negarse nuestro reconocimiento, cuando observan todavia un punto de nuestro territorio ocupado por los españoles...

Todo esto es urjentísimo i principalmente que las naciones sepan que nos hallamos constituidos, o que al ménos tenemos un Congreso con quien ellas puedan tratar, i que la España i la Santa Alianza sepan que no es este punto de Chiloé con el que deben contar. Estos fueron los motivos i las miras que tuvo el Congreso para declararse momentáneamente. Yo estoi, señores, en la intelijencia que las provincias desobedecen la convocatoria del Director, porque en esto creen que no le agravian, porque cuando las provincias le aumentan sus atribuciones en esa lei fundamental que han dado, no se negarian ahora si creyesen que en esto le agraviaban. Es preciso, pues, que las provincias conozcan que, en la persona del señor Freire, no le agravian, que sepan que, en la persona del primer Majistrado de la República, le agravian i desobedecen. Ahora, pues, señor, es un deber del Supremo Director, respecto de los que están reunidos, tiene un deber de reconocer en ellos la autoridad lejislatíva, porque

  1. ¿I cómo este mismo orador reconoce en el oficio a Coquimbo legalmente proclamado el hecho de la indivisibilidad de los vínculos en el acta de los Plenipotenciarios de las tres provincias, sin reparar la base de la poblacion que nos recomienda con tanta sabiduría?
  2. La esclarecida política de Inglaterra reconoce dos bases principales de prosperidad en su reino, a saber: su comercio i su marina. Con el primero se ha asegurado la riqueza nacional i la de su poblacion. Estas Américas coloniales jamas entraron en los cálculos de sus inmensas especulaciones. Su tráfico indirecto, por medio de los monopolistas peninsulares, era demasiado insignificante para que se hubiese apreciado en algo. La separacion de las Américas del dominio español ha sido constantemente el objeto en que la Gran Bretaña ha fijado sus vistas. Este evento que su previsión aguardaba tiempo há, le ha hecho tocar todas las ventajas consiguientes. La Inglaterra emite en sus manufacturas, sobre cuarenta i tres millones de libras esterlinas cada año para todos los puntos, i ha visto consumidas en la América del Norte i Sur, anualmente, sobre dieziocho millones. En artículos solamente de algodon ha visto anualmente consumir a los pueblos recien emancipados sobre un millon de libras esterlinas. Su prolinda política prevé con igual acierto que la nueva existencia nacional ha destinado estas rejiones a los mas eminentes progresos. El aumento de su poblacion, de sus riquezas, de su civilizacion, efectos naturales i necesarios del tráfico libre, son otras tantas ventajas que refluyen sobre la política inglesa. El desenvolvimiento del gusto i de las luces, uniformando el sentimiento del nuevo inundo con el mundo europeo, creará nuevas necesidades facticias, i este espíritu de lujo consiguiente. La Inglaterra será la nacion que casi esclusivamente logre las ventajas que ofrece el comercio i tráfico directo de estas inmensas rejiones destinadas por la naturaleza a ser puramente agricultoras. Si la Europa, en jeneral manufacturera, consume anualmente veintiún millones de libras esterlinas de la industria británica ¿qué no debe prometerse de las disposiciones de unos países, cuyas riquezas numerarias i rurales les ponen en el caso de no poder rivalizar jamas la industria inglesa? La segunda adquiere eminentes ventajas ocupada en el tráfico directo i sus retornos. Las largas navegaciones son la mejor academia náutica. La nacion inglesa, cuya fuerza nacional está en su marina, perfecciona su disciplina i la táctica de sus milicias náuticas. Los capitalistas invierten sus fondos en la construccion de buques, cuya especulacion contribuye eficientemente a la fuerza i a la riqueza nacionales. ¿Seria presumible que a todas estas ventajas reales prefiriese aquella profunda nacion una idea caballeresca de imponer a las metrópolis europeas condiciones semejantes a las que el valiente Hidalgo de la Mancha impuso al caballero de los espejos? I cuando una política tan quijotesca ocupase aquellas cabezas, la memoria de los resultados que sus tentativas sobre los pueblos arjentinos tuvieron el año de 1807, ¿no seria bastante para volverles el juicio? Yo creo, pues, que la accesion de que la política de Inglaterra pierde mucho, reconociendo nuestra independencia, es una frase de elocuencia de que el orador se sirvió acaso