Aguardaba el gobernador don Luis Dasmariñas nuevas del capitan Juan Xuarez Gallinato, y del gobernador Esteban Rodriguez de Figueroa, del viaje que cada uno había hecho, en principios deste año, de noventa y seis, á Camboja y á Mindanao; cuando por el mes de Junio, llegó aviso á Manila que había dos navíos del embocadero del Espíritu Santo adentro entre las islas; y que, en ellos venía proveido de España nuevo gobernador, don Francisco Tello de Guzman, caballero del hábito de Santiago, natural de Sevilla, tesorero de la casa de la contratacion de las Indias; que entró en Manila á los primeros de Julio, y fué recibido al gobierno. Juntamente se entendió, quedaba en la Nueva España, electo por Arzobispo de Manila, Fr. Ignacio de Santibañez, de la orden de San Francisco, natural de Santibañez, tierra de Burgos: por haber muerto en Madrid el Obispo Fr. Domingo de Salazar, y que quedaba electo Obispo de la ciudad de Segovia, en la provincia de Cagayan, Fr. Miguel de Venavides, natural de Carrion, religioso de la orden de Santo Domingo, que había ido á España, por compañero del Obispo Fr. Domingo de Salazar; y que tambien quedaba en Méjico, electo por Obispo de la ciudad