Aprobar tu constancia, en esta instancia,
con alta prevision el Cielo quiso,
y à no ser inflexîble tu constancia,
rendirse tu valor fuera preciso;
pero tu egemplo en esta circunstancia
fue à los demás educacion y aviso,
que expresa el cómo para dar las Leyes,
han de saber del mal y el bien los Reyes,
Dijo la Ninfa, y suspendiendo el dique
que fluyó todo el dicho triquitraque,
rascóse la nariz con el menique,
y fuese sin decir: ¿Qué hay, badulaque?
Yo me piqué, porque es razon me píque
de tratarme una Moza como un zaque:
monto en cólera, voy, y en un penséque
se me ocultó danzando el zarambeque.
Viendo que ya no hay diablo que la siga,
y que la descarada me dió soga,
con la brega, el enojo y la fatiga,
el pecho late, el corazon se ahoga:
asustado despierto, y se mitiga
el sobresalto, que me dió esta droga,
y para que à la burla satisfaga,
la ofrezco el Sueño, y el Leƈtor la paga.