Página:Tradiciones peruanas - Tomo I (1893).pdf/78

De Wikisource, la biblioteca libre.
Esta página no ha sido corregida
72
Tradiciones peruanas

Pérez, como Pilatos, autorizaba con su impasible presencia el escarnecedor castigo.

El espía no quiso ver más profanaciones, escapó como pudo y fué con el chisme á la Inquisición, que pocas horas después echó la zarpa encima á más de cien judíos portugueses.

Al judío Manuel Bautista Pérez le pusieron los católicos limeños el apodo de Pilatos, y la casa quedó bautizada con el nombre de casa de Pilatos.

Tal es la leyenda que el pueblo cuenta. Ahora veamos lo que dicen los documentos históricos.

En la Biblioteca de Lima existe original el proceso de los portugueses, y de él sólo aparece que en la calle del Milagro existió la sinagoga de los judíos, cuyo rabino ó capitán grande (como dice el fiscal del Santo Oficio) era Manuel Bautista Pérez. El fiscal habla de profanación de imágenes; pero ninguna municiosidad refiere en armonía con la popular conseja.

El juicio duró tres años. Quien pormenores quiera, búsquelos en mis Anales de la Inquisición de Lima.

Pérez y diez de sus correligionarios fueron quemados en el auto de fe de 1639, y penitenciados cincuenta portugueses más, gente toda de gran fortuna. Parece que al portugués pobre no le era lícito ni ser judío, ó que la Inquisición no daba importancia á descamisados.

Y no sé más sobre Pilatos ni sobre su casa.

(1868)