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Las traquinenses
Deyanira
Partes muy pronto, habiendo tardado tanto tiempo en venir, y antes de que hayamos reanudado la conversación.
Licas
Si quieres informarte de algo, heme aquí.
Deyanira
¿Dirás sinceramente la verdad?
Licas
¡Pongo al gran Zeus por testigo! Por lo menos, lo que me es conocido.
Deyanira
¿Quién es esa mujer que has traído aquí?
Licas
Viene de Eubea; pero no puedo decir de qué padres ha macido.
El mensajero
¡Hola! ¡Tú, mira aquí! ¿A quién crees hablar?
Licas
Y tú, ¿por qué me interrogas?
El mensajero
Atrévete á responder, si estás en tu juicio, á lo que te pregunto.
Licas
Hablo á la reina Deyanira, hija de Eneo, esposa de Heracles, y á menos que mis ojos no me engañen, á mi dueña.
El mensajero
Eso es lo que yo quería oir de ti. ¿Dices que es tu dueña?
Licas
Ciertamente, con justicia.
Tomo I
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