INICIATIVAS FEMENINAS 153
porregaños ó por bofetones. ¿Cómo quejarnos luego de que los niños, con su espíritu de imi- tación, tengan esas mismas alternativas de mal humor?
Uno de los acuerdos tomados por los padres de los niños que se educan en Charonne fué que, como primera medida para la buena educa- ción de sus hijos, debían primero corregirse ellos á sí mismos. Estonos recuerda un pensamiento de Tolstoi (1): “Toda la educación de los niños con- siste en la educación de nosotros mismos. Por extraño que parezca, en la propia educación de los padres está el medio de acción más poderoso para la de sus hijos. De ahí el artículo 1.” y úni- co del reglamento que se han impuesto algunos: “perfecciónate á ti mismo,, que es la línea de conducta más noble y más práctica cuando se quiere ayudar y contribuir al perfeccionamiento de los demás,,.
IV
La primera reunión de la Unión familiar fué un feliz preámbulo á los estudios posteriores, de los cuales estimamos un deber decir algo.
En la segunda reunión se abordó un punto esencial para la buena marcha de una familia: el de determinar por qué el padre y la madre deben marchar siempre de acuerdo.
Es imposible repetir aquí todo lo bueno que allí se dijo con aplicación especial á las clases populares; tampoco daremos íntegro el resumen publicado por el Boletín de la Unión (2): nos
(1) Carta de Tolstoi á un amigo, fechada en Diciembre del 903, y publicada por la revista rusa La Parole libre (Re- produc. en el Petit Temps del 7 Febrero 904).
(2) Número correspondiente á Julio de 1904.