podíamos tomarles el rastro á los heraldos, llegué al Cuero.
Allí nos quedamos ayer esperando las mulas, Santiago amigo.
Te cumpliré, pues, cuanto antes mi oferta para poder seguir viaje, y al llegar hoy siquiera á Laquinhan, que es donde me propongo dormir.
Estamos á orillas del Cuero, del famoso Cuero, adonde no pudo llegar el general Emilio Mitre, cuando su expedición, por ignorancia del terreno, costándole esto el desastre sufrido. Y, sin embargo, llegó á Chamalcó, y de allí contramarchó dejando el Cuero seis leguas al Norte.
Es verdad que el General buscaba también la Amarga en su marcha de retroceso, creyendo en las anotacicnes de las malas cartas geográficas que circulan con la Amarga pintada como una gran laguna, siendo así que no es sino un inmenso cañadón.
Son los desagües del Río 5.º, ya sabes, y lo más parecido que puedo indicarte son los desagües del Río 4.º, ó sean los cañadores de Lobay.
Como tú eres uno de los amigos de la República Argentina que más se interesa en ella, que más se ha preocupado de sus grandes problemas, estudiando la cuestión fronteras é indios con una constancia envidiable, te diré en lo que consistió el error estratégico principal del General Mitre.
El General llegó á Witalobo, lugar muy conocido donde he estado yo.
Son dos médanos que forman un portezuelo. Hay en ellos alfalfa, de ahí vino la denominación, que entonces le dieron, el de médano de la alfalfa, creyende haber hecho un descubrimiento.
No puedo decirte con exactitud en qué latitud y longitud queda este punto.