rio Frio con el Carreleufu. No pudiendo avanzar mas arriba por el rio, trataron de subir un cerro para ver las campañas, pero no lo consiguieron. Abandonaron el rio Palena a los diez dias i se dirijeron al rio Aisen, en que hallaron los mismos obstáculos, de modo que tuvieron que volverse regresando a Castro a los ochenta i dos dias de viaje [1].
Los otros dos viajes se emprendieron a los lejanos archipiélagos de Huaitecas, Chonos i Guayaneco con el fin de llevar la fé cristiana a las tribus australes de los Guaihuenes, Chonos, Caucahues, Calenes i Taijatafes, obedeciendo a la recomendacion hecha por el virei Amat. Los misioneros no se limitaban en estos viajes a catequizar a los indios mui poco numerosos que vivian dispersos en este dilatado laberinto de canales, sino que trataban de persuadirlos a que se vinieran con ellos a Chiloé para vivir allí, quedando de esa manera bajo su tutela inmediata, como se habia efectuado con los que se establecieron en la isla de Huar i otros puntos. En verdad, con este sistema algo cruel todo este estenso archipiélago quedó despoblado, pero mediando entre Chiloé i Huaitecas el borrascoso i anchuroso golfo de Huafo, era casi imposible atender con regularidad a esas tribus desde Chiloé.
Debemos a D. Roberto Maldonado el conocimiento de un hecho importante que se relaciona con estas misiones. Los pescadores del rio Inio, en el estremo Sur de la isla de Chiloé i frente al archipiélago de Huaitecas, le refirieron que a orillas de este rio se hallan vestijios de una capilla que sirvió a los primitivos indios chonos que pasaron a la isla grande conducidos por los misioneros [2].
Puede ser que esta capilla sirviera tambien como la última avanzada de la mision circular, adonde acudirian anualmente desde Huaitecas los chonos i guaihuenes ya convertidos. Despues de que estos se habian trasladado mas o ménos en 1715 (?) a las cercanias de Castro debido a los esfuerzos del fervoroso padre mercenario Fr. Agustin Guevara[3], esta capilla habria quedado sin uso.
Habiéndose aprobado la proyectada espedicion a las tribus australes por el gobernador D. Tomas De Jauregui, hijo del virei del Perú D. Agustin Jauregui, i del presidente de la mision Fr. Juan B. Peirano, los padres Fr. Benito Marin i Fr. Julian Real, encargados de ella, hicieron todos los aprestos necesarios, mandando construir una piragua grande i dos medianas, juntando prácticos, entre ellos a Don Pedro (Mancilla?) [4], un piloto de apellido Oyarzun, marineros escojidos
- ↑ Moraleda, l. c. p. 426. La version de Agüeros es ménos noticiosa i difiere de Moraleda. Hemos preferido esta por estar basada sobre la relacion auténtico de Fernández.
- ↑ Estudios jeográficos sobre Chiloé, 1897 p. 104.
- ↑ Eyzaguirre, l. c. t. II p. 74. La Historia de la Compañia de Jesus de la Provincia del Paraguay por el P. Pedro Lozano, trae buenos datos sobre las primeras misiones de los Chonos.
- ↑ Véase mas abajo "Don Pedro Mancilla".