una familia antigua, pero pobre que él ha ilustrado con sus hechos y con uno de sus libros más característicos: Los Recuerdos de Provincia, destinado á contar su vida y la de sus deudos próximos y remotos.
Como la mayoría de la juventud de su tiempo, tomó participación en las luchas civiles desempeñando con ese motivo funciones militares, á contar desde el año 1826.
Aun cuando no fué la militar su propia carrera, á pesar de haber alcanzado el grado de general de brigada, Sarmiento aspiró en los últimos tiempos de su vida á ser tenido como tal, poniendo en ello gran suma de amor propio, bien que no dejase de reconocer que su gloria la debía á otras causas que no á pretendidas batallas ganadas estratégicamente desde el gabinete presidencial.
En 1831 emigró por vez primera á Chile, de donde volvió para emigrar nuevamente en 1842, dejando escrito en una pared, y en lengua francesa, el programa de su vida de publicista: Las ideas no se matan.
Entre 1836 y 1842 habíanse revelado ya sus