52 POLÍTICA DOMÉSTICA
mente los pormenores de los gastos, pues la prospe- ridad de la familia depende de la exacta observan- cia de estos principios de economía doméstica.
El matrimonio ensancha el círculo de las relacio- nes sociales de cada uno de los cónyuges. Lo re- petimos: la recién casada debe cultivar esas nuevas amistades, y darles por base duradera el afecto y la estimación, conservando sus antiguas relaciones.
Pero, respecto de este particular, uno de los pun- tos más importantes para la mujer es su juiciosa elección: inclínese á personas instruidas y respetables, y no á gente frívola que pueda ocasionarle tristes de- cepciones, cuando llegue á conocer que no le es po- sible estimar á quienes ella ha dispensado inconside- radamente su amistad.
También deberá evitar relacionarse con personas. que la aventajen demasiado en rango y fortuna, no sea que después de haberse arruinado para igualarse, á ellas en lujo, dejen de tratarla; todavía, sin embar- go, podrá considerarse feliz, si aún es tiempo de vol- ver á la esfera de relaciones, de la cual no debió sa- lir, y si le es dado restablecer el orden por medio de una prudente economía.
