Resúmen en prosa de las metamórfosis de Ovidio
Habiendo observado la falta que hace á los jóvenes dedicados al estudio de las nobles artes un resúmen de las Metamórfosis de Ovidio, en que se hallen explicadas con la mayor concision y claridad, y que sea de poco coste, se les ofrece el presente, que escribió en frances el Abate Ragois, preceptos del Serenísimo Señor Don Luis Augusto de Borbon, Duque de Maine.
En la explicacion de las fábulas se notará que el Escritor hace paralelos entre los héroes de la Sagrada Escritura y los de la fábula, que algunos conceptúan de violentos; y otros de naturalísimos; pero qualquiera que medite sobre ellos, no podrá menos de confesar que muchos asuntos mitológicos se confundirán con los del antiguo Testamento; pues se ve que de la creacion del mundo pueden haber sacado la fábula del Caos convertido en quatro elementos: de la creacion de Adan, la de la estatua de Prometeo: de la inocencia de Adan, su caida en el pecado, la perversidad de las costumbres de los hombres, las guerras subsiguientes, y la estatua de Nabucodonosor, la de los quatro Siglos. De Noe y sus hijos Sem, Cam y Jafet es presumible inventasen á Saturno, y sus tres hijos, Júpiter, Neptuno y Pluton: de Noe y su muger, que salieron de las aguas del diluvio, á Saturno y su muger, que se dicen engendrados por Océano y Tetis. Noe salvó tres hijos del diluvio; Saturno devoró los suyos, reservando tres. Noe repartió el mundo entre sus tres hijos; Saturno le repartió igualmente entre los tres suyos. De la caida de Luzbel y sus sequaces, y del asunto de la torre de Babel, pudieron tomar el de la caida de los Gigantes: de Nabucodonosor convertido en bruto, la fábula de Licaon convertido en lobo: del diluvio universal, el diluvio de Deucalion. Moyses nació en Egipto, fué expuesto en el Nilo, tuvo dos madres Jocabel, y la hija de Faraon, que le adoptó; pasó quarenta años en la Arabia; subia con frecuencia al monte Sinaí, y su nombre quiere decir libertado de las aguas; los poetas describen á Baco nacido en Egipto, criado en una montaña de la Arabia; tuvo dos madres Semele, é Ino; habitó en las márgenes del Nilo, y le nombraron nacido de las aguas. Josue combatió y venció á los gigantes Rey Og, y su exército, y tuvo siempre en su compañía al fiel Caleb; Hércules combatió y venció á los gigantes Albion, Bergion, Gerion y Antéo, y tenia un perro que siempre les seguia. Sanson mató un leon; Hércules mató otro: Sanson se desposó con Dálila, y perdió sus fuerzas; Hércules se desposó con Omfale, é hilaba con ella: Sanson acabó sus dias entre las columnas de Gaza; Hércules terminó sus conquistas entre las columnas de su nombre. Jonás fué tragado por la ballena, y salió sin lesion alguna; Hércules entró en el vientre del monstruo que habia de devorar á Hesione, y salió despues de arrancarle las entrañas. Abrahan llevó á su hijo al monte sin prevenirle nada, despues les explicó la necesidad que tenia de sacrificarlo para obedecer á Dios, y ser feliz: Isac subió sobre la leña que él mismo habia llevado: Dios hizo detener el brazo de Abrahan dispuesto á inmolar á su hijo, y en su lugar sacrificar un cordero. Agamenon llevó su hija sin prevenirla, y despues la hizo presente la necesidad de sacrificarla: Ifigenia subió al ara, y Diana la libertó poniendo en su lugar una cierva. El sacrificio de Jepté es idéntico al de Idomeneo. Del incesto de las hijas de Lot pudo inventarse el de Mirra con su padre Ciniro. De los cabellos de Sanson cortados por Dálila, el cabello de Niso cortado por su hija Scila. De José acusado por la muger de Putifar, la acusacion de Belerofonte por la muger de Proclo.
En vista de esta comparacion no se estrañará que el Abate Ragois usase de los paralelos que se notan en su resúmen, ni que Ovidio y otros poetas mitológicos se valiesen de la acendrada moral de la santa Biblia, encubriéndola ingeniosamente, para poder extender las máximas admirables que contiene, á fin de corregir las costumbres relaxadas de los que profesaban la religion gentilicia. Pero prescindiendo de si son, ó no, las Metamórfosis sacadas de la Sagrada Escritura, esta obrita será utilísima á todos los jóvenes, porque los que se dedican al estudio de las nobles artes, hallarán en ella ciento quarenta y cinco asuntos para fecundizar su imaginacion, inventando de ellos dibuxos, quadros, estatuas y baxos relieves; y á los demas en general, porque con la lectura de estos agradables cuentos y su explicacion, retendrán en la memoria mucha doctrina moral, que guiará su espíritu á practicar las virtudes, y aborrecer los vicios; y como se ven continuamente pinturas, tapices, estampas, estatuas y baxos relieves, que representan pasages de las Metamórfosis; los conocerán y explicarán de modo que en ello tendrán el deleyte y utilidad que tanto se recomiendan en los escritos que se han de dar al público.
Aunque la fábula sea una ficcion, todo quanto representa son verdades, que nos enseñan reglas de bien vivir. Las fábulas mejores son las de Ovidio, porque la moral que encierran tiene muy grande semejanza con la de la Sagrada Escritura, y porque no puede tener perfecto conocimiento de los poetas quien no posea el de las Metamórfosis.
Todas las personas de buen gusto, que dedican á sus hijos al estudio de las bellas letras ó de las bellas artes, procuran enseñarles la fábula; pero ya sea porque se hallan pocos maestros que la sepan bien, ó ya por falta de libros que la traten sucintamente, sin omitir nada de esencial, lo cierto es que pocos niños la aprenden con perfeccion.
Este resúmen será útil á maestros y discípulos; porque los unos hallarán quanto deben enseñar, y los otros lo que deben aprender.
La corta explicacion moral que se ha puesto al fin de cada fábula, bastará para comprender fueron inventadas á fin de instruir á los niños sin fatigarlos; porque se debe siempre procurar que en vez de causarles molestia al estudio, les sirva de entretenimiento.
Fábula I. El Caos convertido en quatro Elementos........................................................................................................................................................................................................ | pág. 1 |
Fáb. II. De la formacion del hombre........................................................................................................................................................................................................ | 2 |
Fáb. III. De los quatro Siglos........................................................................................................................................................................................................ | 3 |
Fáb. IV. Las quatro Estaciones......................................................................................................................................................................................................... | 4 |
Fáb. V. Los Gigantes......................................................................................................................................................................................................... | 5 |
Fáb. VI. Licaon......................................................................................................................................................................................................... | 6 |
Fáb. VII. El Diluvio universal......................................................................................................................................................................................................... | ibid. |
Fáb. VIII. De cómo el mundo se volvió á poblar despues del Diluvio......................................................................................................................................................................................................... | 7 |
Fáb. IX. De la Serpiente Piton......................................................................................................................................................................................................... | 8 |
Fáb. X. Apolo y Dafne......................................................................................................................................................................................................... | 9 |
Fáb. XI. Los amores de Júpiter y Io......................................................................................................................................................................................................... | 10 |
Fáb. XII. Pan y Siringa......................................................................................................................................................................................................... | 12 |
Fábula I. La caida de Faeton......................................................................................................................................................................................................... | 13 |
Fáb. II. Las Helíades......................................................................................................................................................................................................... | 14 |
Fáb. III. Cicno......................................................................................................................................................................................................... | 15 |
Fáb. IV. Calisto convertida en osa......................................................................................................................................................................................................... | 16 |
Fáb. V. El Cuervo......................................................................................................................................................................................................... | 17 |
Fáb. VI. Coronis convertida en corneja......................................................................................................................................................................................................... | 18 |
Fáb. VII. Nictimene convertida en mochuelo......................................................................................................................................................................................................... | 19 |
Fáb. VIII. Ocirroe convertida en yegua......................................................................................................................................................................................................... | 20 |
Fáb. IX. Baco convertido en piedra de toque......................................................................................................................................................................................................... | 21 |
Fáb. X. Aglaura convertida en estatua de piedra......................................................................................................................................................................................................... | 22 |
Fáb. XI. Júpiter enamorado de Europa......................................................................................................................................................................................................... | 23 |
Fábula I. Cadmo......................................................................................................................................................................................................... | 25 |
Fáb. II. Acteon convertido en ciervo......................................................................................................................................................................................................... | 26 |
Fáb. III. Semele abrasada......................................................................................................................................................................................................... | 27 |
Fáb. IV. Eco......................................................................................................................................................................................................... | 28 |
Fáb. V. Narciso......................................................................................................................................................................................................... | 29 |
Fáb. VI. Baco y Penteo......................................................................................................................................................................................................... | 30 |
Fáb. VII. Los Marineros convertidos en delfines......................................................................................................................................................................................................... | 31 |
Fáb. VIII. Penteo despedazado......................................................................................................................................................................................................... | 32 |
Fábula I. Alcitoe......................................................................................................................................................................................................... | 33 |
Fáb. II. Píramo y Tisbe......................................................................................................................................................................................................... | 34 |
Fáb. III. Marte y Venus cogidos en adulterio......................................................................................................................................................................................................... | 35 |
Fáb. IV. Leucotea y Clicia......................................................................................................................................................................................................... | 36 |
Fáb. V. Salmacis y Hermafrodita......................................................................................................................................................................................................... | 37 |
Fáb. VI. Ino y Melicerto......................................................................................................................................................................................................... | 38 |
Fáb. VII. Descripcion de los infiernos......................................................................................................................................................................................................... | 39 |
Fáb. VIII. Cadmo y Hermione......................................................................................................................................................................................................... | 41 |
Fáb. IX. Júpiter y Dánae......................................................................................................................................................................................................... | 42 |
Fáb. X. Medusa y Perseo......................................................................................................................................................................................................... | 43 |
Fáb. XI. Atlas......................................................................................................................................................................................................... | 44 |
Fáb. XII. Perseo y Andrómeda......................................................................................................................................................................................................... | 45 |
Fábula I. Finéo......................................................................................................................................................................................................... | 47 |
Fáb. II. Polidecto convertido en piedra......................................................................................................................................................................................................... | 48 |
Fáb. III. Pireneo y las Musas......................................................................................................................................................................................................... | 49 |
Fáb. IV. Las Piérides......................................................................................................................................................................................................... | 50 |
Fáb. V. Tiféo......................................................................................................................................................................................................... | 51 |
Fáb. VI. Pluton y Proserpina......................................................................................................................................................................................................... | 52 |
Fáb. VII. Stelio convertido en tarántula......................................................................................................................................................................................................... | 53 |
Fáb. VIII. Ascalafo convertido en buho......................................................................................................................................................................................................... | 54 |
Fáb. IX. Las Sirenas convertidas en peces......................................................................................................................................................................................................... | 55 |
Fáb. X. Aretusa convertida en fuente......................................................................................................................................................................................................... | 56 |
Fáb. XI. Triptolemo......................................................................................................................................................................................................... | 57 |
Fábula I. Aracnea......................................................................................................................................................................................................... | 59 |
Fáb. II. Niove......................................................................................................................................................................................................... | 60 |
Fáb. III. Los Aldeanos convertidos en ranas......................................................................................................................................................................................................... | 61 |
Fáb. IV. El Sátiro Marsius......................................................................................................................................................................................................... | 62 |
Fáb. V. Pelope......................................................................................................................................................................................................... | 63 |
Fáb. VI. Tereo y Filomela......................................................................................................................................................................................................... | 64 |
Fáb. VII. Bóreas y Oritia......................................................................................................................................................................................................... | 65 |
Fáb. VIII. Las Harpias......................................................................................................................................................................................................... | 66 |
Fábula I. El Vellocino de oro......................................................................................................................................................................................................... | 67 |
Fáb. II. Jason y Medea......................................................................................................................................................................................................... | 68 |
Fáb. III. Eson rejuvenecido......................................................................................................................................................................................................... | 69 |
Fáb. IV. Las Ninfas de Baco......................................................................................................................................................................................................... | 70 |
Fáb. V. La Ninfa Heria y su hijo......................................................................................................................................................................................................... | 71 |
Fáb. VI. Las Hormigas convertidas en hombres......................................................................................................................................................................................................... | 72 |
Fáb. VII. Céfalo y Pocris......................................................................................................................................................................................................... | ibid. |
Fáb. VIII. La muerte de Pocris......................................................................................................................................................................................................... | 74 |
Fáb. I. Niso y Scila......................................................................................................................................................................................................... | 75 |
Fáb. II. Minotauro......................................................................................................................................................................................................... | 76 |
Fáb. III. Teseo......................................................................................................................................................................................................... | 77 |
Fáb. IV. Dédalo, Icaro y Talo......................................................................................................................................................................................................... | 78 |
Fáb. V. Meleagro y Atalanta......................................................................................................................................................................................................... | 79 |
Fáb. VI. Aqueloó y Perimele......................................................................................................................................................................................................... | 81 |
Fáb. VII. Filemon y Baucis......................................................................................................................................................................................................... | 82 |
Fáb. VIII. Proteo......................................................................................................................................................................................................... | 83 |
Fáb. IX. Erisicton y Metra......................................................................................................................................................................................................... | 84 |
Fáb. I. Hércules y Aqueloó......................................................................................................................................................................................................... | 85 |
Fáb. II. El Centauro Neso......................................................................................................................................................................................................... | 86 |
Fáb. III. Licas convertido en peñasco......................................................................................................................................................................................................... | 87 |
Fáb. IV. Hércules inmortalizado......................................................................................................................................................................................................... | 88 |
Fáb. V. Lucina y Galantis......................................................................................................................................................................................................... | 89 |
Fáb. VI. Driope y Príapo......................................................................................................................................................................................................... | 90 |
Fáb. VII. Biblis y Cauno......................................................................................................................................................................................................... | 91 |
Fáb. VIII. Ifis y Janta......................................................................................................................................................................................................... | ibid. |
Fábula I. Orfeo y Eurídice......................................................................................................................................................................................................... | 93 |
Fáb. II. Atis convertido en pino......................................................................................................................................................................................................... | 94 |
Fáb. III. Cipariso......................................................................................................................................................................................................... | 95 |
Fáb. IV. Ganimedes......................................................................................................................................................................................................... | ibid. |
Fáb. V. Jacinto......................................................................................................................................................................................................... | 96 |
Fáb. VI. Los Cerastos convertidos en toros......................................................................................................................................................................................................... | 97 |
Fáb. VII. Las Propetidas......................................................................................................................................................................................................... | 98 |
Fáb. VIII. Pigmaleon......................................................................................................................................................................................................... | ibid. |
Fáb. IX. Mirro y Ciniro......................................................................................................................................................................................................... | 99 |
Fáb. X. Adonis......................................................................................................................................................................................................... | 100 |
Fáb. XI. Atalanta é Hipomenes......................................................................................................................................................................................................... | 101 |
Fábula I. Orfeo y las Bacantes......................................................................................................................................................................................................... | 103 |
Fáb. II. Midas......................................................................................................................................................................................................... | 104 |
Fáb. III. Las Cañas parleras......................................................................................................................................................................................................... | 105 |
Fáb. IV. Laomedonte y Hesione......................................................................................................................................................................................................... | 106 |
Fáb. V. Tetis y Peleo......................................................................................................................................................................................................... | 107 |
Fáb. VI. Dedalion y Quione......................................................................................................................................................................................................... | 108 |
Fáb. VII. Ceix y Alcione......................................................................................................................................................................................................... | 109 |
Fáb. VIII. Esaco y Hesperia......................................................................................................................................................................................................... | 110 |
Fábula I. La serpiente convertida en piedra......................................................................................................................................................................................................... | 112 |
Fáb. II. Ifigenia......................................................................................................................................................................................................... | 113 |
Fáb. III. Cicno......................................................................................................................................................................................................... | 114 |
Fáb. IV. El combate de los Centauros y los Lapitas......................................................................................................................................................................................................... | 115 |
Fáb. V. Cenis......................................................................................................................................................................................................... | ibid. |
Fáb. VI. Periclimenes......................................................................................................................................................................................................... | 117 |
Fáb. VII. La muerte de Aquiles, hijo de Peleo y de Tetis......................................................................................................................................................................................................... | 118 |
Fábula I. Ulises y Ayax......................................................................................................................................................................................................... | 119 |
Fáb. II. Hecuba convertida en perra......................................................................................................................................................................................................... | 120 |
Fáb. III. Memnon......................................................................................................................................................................................................... | 121 |
Fáb. IV. Eneas......................................................................................................................................................................................................... | ibid. |
Fáb. V. Las hijas de Anio......................................................................................................................................................................................................... | 122 |
Fáb. VI. Las hijas de Orion......................................................................................................................................................................................................... | 123 |
Fáb. VII. Acis, Polifemo y Galatea......................................................................................................................................................................................................... | 124 |
Fáb. VIII. Glauco......................................................................................................................................................................................................... | 125 |
Fábula I. Scila......................................................................................................................................................................................................... | 126 |
Fáb. II. Los Cecrops......................................................................................................................................................................................................... | 127 |
Fáb. III. De la Sibila Cumea......................................................................................................................................................................................................... | ibid. |
Fáb. IV. La baxada de Eneas á los infiernos......................................................................................................................................................................................................... | 128 |
Fáb. V. Ulises......................................................................................................................................................................................................... | 129 |
Fáb. VI. Los Compañeros de Ulises......................................................................................................................................................................................................... | 130 |
Fáb. VII. Pico convertido en páxaro......................................................................................................................................................................................................... | 131 |
Fáb. VIII. Los páxaros de Diomedes......................................................................................................................................................................................................... | ibid. |
Fáb. IX. Las Naves de Eneas......................................................................................................................................................................................................... | 132 |
Fáb. X. El Pastor convertido en olivo......................................................................................................................................................................................................... | 133 |
Fáb. XI. Eneas deificado......................................................................................................................................................................................................... | ibid. |
Fáb. XII. Vertumno y Pomona......................................................................................................................................................................................................... | 134 |
Fáb. XIII. Ifis y Anaxárete......................................................................................................................................................................................................... | 135 |
Fáb. XIV. Rómulo y Hersilia......................................................................................................................................................................................................... | ibid. |
Fábula I. Micilo......................................................................................................................................................................................................... | 137 |
Fáb. II. Pitágoras......................................................................................................................................................................................................... | ibid. |
Fáb. III. Numa Pompilio......................................................................................................................................................................................................... | 138 |
Fáb. IV. Hipólito......................................................................................................................................................................................................... | 139 |
Fáb. V. La Ninfa Egeria......................................................................................................................................................................................................... | 140 |
Fáb. VI. Tages......................................................................................................................................................................................................... | 141 |
Fáb. VII. El Dardo de Rómulo......................................................................................................................................................................................................... | ibid. |
Fáb. VIII. Cipo Venulio......................................................................................................................................................................................................... | 142 |
Fáb. IX. Esculapio......................................................................................................................................................................................................... | 143 |
Fáb. X. Julio Cesar......................................................................................................................................................................................................... | 144 |
El caos era un compuesto de los quatro elementos, que fueron separados, y puestos cada uno en el lugar que le correspondia. El Fuego fué destinado á la mayor altura: el Ayre debaxo: luego el Agua, y la Tierra en el centro del universo.
Esta fábula debe reputarse por verdad, supuesto está sacada del capítulo I.º del Génesis.
Despues de la separacion de los elementos, Prometeo, hijo de Japeto, formó un hombre de tierra y agua con semejanza á los dioses, dándolo vida con una hacha que, por consejo de Minerva, encendió en los rayos del Sol. Irritado Júpiter de su atentado, mandó á Mercurio le atase sobre el Monte Cáucaso, y que una águila le picase el corazon sin quitarle la vida.
Prometéo es palabra griega, que significa muy prudente. Ovidio pudo sacar esta fábula de la Escritura, donde se dice que Dios hizo al hombre á su imagen y semejanza.
La diferencia que se observó en las costumbres de los hombres, fué quizá la causa de inventarse la fábula de los quatro siglos. Llamóse el primero: la edad de oro; á causa de la inocencia que reynaba entónces, y á que la tierra producia todos los frutos sin cultivarla. El segundo: la edad de plata; porque el hombre, habiendo decaido de su pureza, se vió obligado á vestirse, á fabricar casas, y á cultivar la tierra. El tercero: la edad de cobre; porque en él aparecieron la perfidia y el libertinage. El quarto: la edad de hierro; porque ha servido para cometer toda suerte de crímenes, sin exceptuar el parricidio.
Esta fábula es una prueba de la inocencia del hombre en su creacion; presenta despues su corrupcion, y nos recuerda la estatua de Nabucodonosor vista en sueños, que tenia la cabeza de oro, pecho y brazos de plata, el vientre y muslos de bronce, las piernas de hierro, y los pies de hierro y barro.
El siglo de plata empezó quando Saturno fué echado del cielo por su hijo Júpiter, el qual dividió el año en quatro estaciones, y las llamó: la Primavera, el Estío, el Otoño, y el Invierno.
Créese que Júpiter era un rey de Egipto, y que el primero que señaló la variedad y duracion de las quatro estaciones, dándolas el nombre que las diferencia.
Los gigantes, criaturas de la tierra, declararon guerra á los dioses, y amontonaron montes sobre montes para escalar el cielo, y apoderarse de él. Júpiter los confundió, y de su sangre nacieron hombres, que fueron tan malos como sus padres; pues cometieron los crímenes mas enormes.
Por esta fábula, sacada quizá de la historia de Nembrot, ó de los que intentaron fabricar la torre de Babél, quiso Ovidio enseñarnos que los grandes de la tierra, que representan los gigantes, no deben tener ideas contrarias á las de Dios.
Licaon, príncipe de Arcadia, nacido de la sangre de los gigantes, fué tan cruel, que hacia morir á quantos se alojaban en su palacio; y queriéndole castigar por sí mismo Júpiter, fué en figura de hombre; y viendo que le servian carne humana para comer abrasó el alcázar, y convirtió en lobo al tirano.
La fábula de Licaon enseña á los Príncipes á no violar la hospitalidad ni la justicia; y tiene mucha semejanza con la historia de Nabucodonosor, que fué convertido en bruto.
Viendo Júpiter la corrupcion general de los hombres, envió un diluvio universal, y los exterminó á todos, libertando únicamente á Deucalion y á Pirra en una barca; porque habian obrado con justicia, y conservando la inocencia.
Esta es una imitacion del diluvio que tra el Génesis en el capítulo 7. Ovidio se vale de él para manifestar la ventaja de obrar bien; pues es el solo medio de preservarse del pecado, é igualmente de los castigos que se le siguen.
Deucalion, hijo de Prometéo y Pirra, despues del diluvio universal, viendo que habia perecido todo el género humano, fueron al templo de Temis, y la pidieron los inspirase el modo de volver á poblar el mundo. La Diosa les ordenó arrojasen detras de sí los huesos de su madre. Hiciéronlo, y convirtiéronse en hombres los que arrojó Deucalion, y los de Pirra en mugeres.
Los huesos de la madre de Deucalion son las piedras, que á la verdad son como huesos de la tierra, que es nuestra madre comun. Este asunto está sacado de los libros de Moyses; donde dice que despues del diluvio ofreció Noe sacrificios, y volvió á poblar la tierra.
Despues de retiradas al mar las aguas del diluvio, nació del lodo de la tierra una horrorosa serpiente llamada Piton, á quien Apolo mató á flechazos. Por esta accion le llamaron Pitio, y se establecieron juegos y combates pitios, para honrar la memoria de hazaña tan heroyca.
La humedad que quedó despues del diluvio causó muchas exalaciones perjudiciales á la salud: el sol, que es Apolo segun la fábula, las disipó con sus rayos, y por eso dice que mató á Piton, que en griego quiere decir podredumbre.
Apolo, hijo de Júpiter, y Latona, vanaglorioso del triunfo conseguido con la muerte de Piton, se atrevió á burlarse de las astucias de Cupido: vengóse este dios tirándole una flecha dorada para rendirle al amor de Dafne, hija de Peneo rio de Tesalia, y al mismo tiempo disparó otra á Dafne, cuya asta estaba chapeada de plomo, para inspirarla desamor ácia Apolo; el qual, no pudiendo con esto lograr le amase Dafne, por mas obsequios que la rendia, quiso emplear la violencia; y viéndose ella perseguida, imploró el socorro de su padre, que la convirtió inmediatamente en laurel. Este árbol desde entónces fué consagrado á Apolo, y de él se hacen las coronas para los victoriosos.
Dafne, aunque amada del mejor de los dioses, se resistió hasta convertirse en laurel, para enseñar á las de su sexo que la castidad es recompensada con gloria inmortal.
Enamorado Júpiter de la hermosa Io, hija del rio Inaco, la convirtió en vaca para ocultar su cariño á Juve, pero habiendo la diosa descubierto su pasion, le pidió la vaca; y habiéndola obtenido, se la hizo guardar á Argos, que tenia cien ojos. Mercurio le adormeció tocando su flauta, y le cortó la cabeza. Juno puso los ojos de Argos en la cola de su pabon, é infundió tal furia á la vaca, que despues de haber corrido toda la tierra, paró al fin en Egipto, donde Júpiter la volvió á su primera forma, y la hizo adorar con el nombre de Isis.
Siringa era la mas hermosa de las Nayades de su tiempo: fué amada de los Sátiros, y resistió siempre á sus deseos. El dios Pan, enamorado de ella, la persiguió hasta el rio Ladon, donde fué convertida en caña; y este dios de los pastores la cortó para inventar la flauta.
En el reynado de un príncipe de Italia, llamado Faeton, hubo un incendio que llegó hasta el Po, el qual dió lugar á esta fábula. Ovidio se sirve de este asunto para advertir á los jóvenes no emprendan cosas superiores á sus fuerzas, y manifestarles que adquiere mas gloria quien desempeña bien un proyecto de poca monta, aconsejado de hombres de experiencia; que el que forma vastos designios, sin poder conseguir el fin de su intento.
Lampetusa, Lampecia y Faetusa, hermanas de Faeton, sintieron tanto la muerte de su hermano, que fueron á buscarle á las orillas del Po, donde las ninfas de este rio le habian enterrado, y lloraron quatro meses sobre la sepultura su desgracia: los dioses compasivos las convirtieron despues en chopos, y sus lágrimas en ambar.
Solemos, á exemplo de las Heliadas hermanas del Faeton, afligirnos quando acontece algun accidente desgraciado á nuestros parientes: entónces su virtud nos debe servir para moderar nuestro dolor.
Cicno, rey de Liguria, amigo y aliado de Faeton, se afligió mucho con la muerte de este jóven príncipe, y lamentó su desgracia con una voz tan melodiosa, que fué convertido en cisne.
Cicno fué en efecto rey de Toscana, y tan afecto á la música, que han fingido fué transformado en cisne, símbolo de ella.
Luego que Júpiter descendió á la tierra para apagar el fuego que el carro del Sol habia encendido, se enamoró de la ninfa Calisto; y hallándola sola en una floresta de la Arcadia, satisfizo su deseo. Habiendo Juno descubierto este delito, convirtió en osa á esta hija de Licaon: mucho tiempo despues, estando cazando su hijo Arcas, la halló, y disponiéndose para dispararla, Júpiter le convirtió en oso, y llevó á los dos al cielo con la figura de la osa mayor y menor.
Calisto en griego significa muy hermosa; y fué convertida en osa, que es la mas fea de todas las bestias, para enseñarnos que una doncella pierde su belleza verdadera quando pierde la castidad.
El Cuervo, que antes era el ave de Apolo, y tenia la pluma blanca, descubrió al dios la infidelidad de la hermosa Coronis, el qual se irritó tanto de la nueva, que mató en el campo á la ninfa estando en cinta de Esculapio dios de la medicina, y tuvo despues tanto pesar de haber dado muerte á su querida, que ennegreció enteramente al cuervo para castigarle de su indiscreto chisme.
El cuervo perdió su blancura, y vino á ser un pajarraco del mas funesto agüero, por haber advertido á Apolo la infidelidad de Coronis; lo qual nos enseña que no debemos jamas anunciar malas nuevas, si no queremos atraernos el odio de las personas á quienes las comunicamos.
Coronis, hija de Corona rey de la Fócida, fué amada de Neptuno; y como le desdeñase, el dios la persiguió hasta casi alcanzarla: ella imploró el socorro de Minerva que la convirtió en corneja, y la tomó baxo su proteccion. Esta diosa habia metido á Erictonio, hijo de Vulcano, nacido sin madre, en un cesto que dio á guardar á las tres hijas de Cecrope, prohibiéndolas ver lo que habia dentro; pero su curiosidad las movió á abrirle, y hallaron un niño, cuya parte inferior era de dragon. La corneja, que lo vió de lo alto de una encina, por haberlo descubierto á Minerva perdió su hermosura, y el mochuelo fué colocado en su lugar.
Esta fábula, como la antecedente, fué inventada para enseñarnos á guardar secreto, y no decir á los grandes señores nada de lo que no han de gustar saber.
Nictimene se enamoró de su padre, y tuvo medio de introducirse en su lecho durante la noche: cometió con él incesto, y los dioses para castigarla la convirtieron en mochuelo, ave que no osa salir durante el dia, y que es aborrecida de todos los otros páxaros.
Hay infinitas gentes que se han convertido en mochuelos por sus crímenes como Nictimene; que se ven obligadas á esconderse de dia para no ser castigadas, y que son aborrecidas de los hombres como el mochuelo de las demas aves.
Ocirroe, hija del Centauro Quiron, no contentándose con saber la medicina que su padre la habia enseñado, quiso mezclarse en profetizar, y Júpiter para castigar su orgullosa vanidad la convirtió en yegua. Dicen que habiendo Quiron dexado caer sobre su pie una flecha de Hércules, le hizo una herida incurable, y los dioses le llevaron al cielo. Es el que llaman los Astrólogos signo de Sagitario.
Ocirroe fué convertida en yegua por haber querido elevarse mas allá de su estado. Los Centauros fueron los primeros que domaron los caballos, y por esta razon los representan medio hombres, y medio caballos.
Apolo, guardando los ganados del rey Admeto, recibió tanto placer en tocar la flauta que los dexó descarriar. Mercurio los escondió en un bosque, donde nadie los vió entrar sino Bato, que ofreció no decirlo porque Mercurio para obligarle á guardar secreto, le dió la mejor vaca del rebaño; pero habiéndose Mercurio presentado en otra forma, le reveló todo quanto habia pasado, de lo qual irritado el dios le convirtió en piedra de toque.
La piedra de toque tiene la propiedad de dar á conocer los metales. Mercurio convirtió á Bato en esta piedra para darnos á entender que los que no saben guardar secreto son como la piedra de toque, y que no debemos jamas descubrir nuestras ideas si no queremos que sean sabidas de todo el mundo.
Habiéndose enamorado Mercurio de Hersé, hija de Cecrope, y hermana de Aglaura, se valió de ésta para que manifestase su pasion á Hersé: ofreció Aglaura servir á Mercurio mediante una suma de dinero, y se irritó tanto Palas de avaricia tan infame, y de que antes hubiese abierto el cesto de Erictornio, que encargó á la Envidia la introduxese zelos de su hermana Hersé: queriendo despues oponerse á los amores de Mercurio, la convirtió éste en estatua de piedra.
El intento del poeta en esta fábula es manifestarnos que la avaricia suele inspirar las cosas mas vergonzosas del mundo, como la promesa que Aglaura hizo á Mercurio, y que si Palas para castigarla encargó á la Envidia la hiciesa zelosa, fué porque nada atormenta tanto á las mugeres como los zelos.
Estando Júpiter enamorado de Europa, se convirtió en toro, y la llevó á nado sobre el lomo hasta la isla de Creta, donde tomó su primera forma, y cumplió su deseo. Nacieron de su union Minos y Radamanto, los quales fueron nombrados jueces del infierno; porque habian dado en el mundo pruebas de ser muy justos.
Algunos habitantes de la isla de Candia se llevaron á Europa, hija de Agenor rey de Fenicia, en un navío cuya proa contenia un toro de escultura, y la presentaron al rey, que era lascivo. Ovidio hizo una fábula de esta historia para advertir á los Príncipes las baxezas á que los arrastra el amor frecuentemente quando se abandonan á esta pasion.
Agenor envió á sus hijos á buscar á Europa con órden de no volver sin ella. Cadmo consultó al oráculo de Apolo para saber donde estaba; el qual sin contestarle le mandó seguir la primera vaca que viese al salir del templo, y habitar en el lugar donde ella le guiase. Sus hermanos fueron devorados por un dragon; pero Cadmo le mató, y sembró sus dientes por consejo de Minerva, de los quales nacieron hombres armados, que se mataron unos á otros, quedando solo cinco, que ayudaron á fabricar la ciudad de Tebas, de la que fué Cadmo fundador.
En esta fábula se ve como algunos padres, por favorecer á los hijos que estiman mas, perjudican á los otros. Agenor siente mucho la ausencia de su hija Europa, y no le da ciudado el perder los otros hijos por hallarla.
Acteon, hijo de Aristeo y Antonee, era un cazador, que se convirtió en ciervo por haber mirado á Diana desnuda quando se bañaba con sus ninfas; y sus propios perros le despedazaron despues.
Nos manifiesta esta fábula, que la pasion de la caza nos vuelve salvages, y nos arruina quando no es moderada, enseñándonos asímismo que no debemos ponernos delante de personas castas, quando no se hallan en estado de ser vistas.
Semele, hija de Cadmo y de Hermione, aconsejada de Juno pidió á Júpiter, de quien era amada en extremo, la fuese á ver con la misma magestad que iba á ver á Juno. Júpiter, que habia jurado concederla qualquiera peticion, fué en efecto con sus rayos; y quedando Semele abrasada, la sacó Júpiter del vientre á Baco, de quien estaba en cinta, y le colocó en su muslo hasta que fué cumplido el tiempo que habia de estar en el seno de su madre. Ino, su tia, tuvo cuidado de él mientras estuvo en la cuna.
A exemplo de Juno vemos que quando las mugeres tienen zelos, usan de todos los medios imaginables para vengarse de sus rivales.
La ninfa Eco divertia á Juno con discursos agradables, impidiéndola así que sorprendiese á Júpiter quando estaba con sus amigas. Enterada la diosa de su artificio, la quitó el uso de la lengua, y despues no podia hablar sino quando habian concluido los otros, pronunciando solo las últimas sílabas. Enamoróse despues de Narciso; y no pudiendo conseguir ser amada de él, se retiró á los valles, donde se secó de dolor, y sus huesos fueron convertidos en piedra.
Esta fábula nos enseña á no ser capa de viciosos como la ninfa Eco, la qual fué castigada por uno de los medios mas sensibles á las mugeres, que es el no poder hablar. Han fingido que se retiró a los valles, porque regularmente es donde se forman los ecos.
Narciso, hijo de Liriope, y del rio Cefiso, era un jóven bellísimo, muy amado de las ninfas. Tiresias predixo á su madre que seria desdichado si llegaba á conocerse. Un dia que fué á caza, se vió en el agua de una fuente; y embelesado de su hermosura, de tal manera se enamoró de sí mismo, que despues de haberse admirado mucho tiempo falleció de amor, y fué convertido en una flor que tiene su nombre.
En nuestros dias se ven muchos Narcisos con tanta presuncion de sí mismos, que les parece no hay quien tenga mejores calidades; lo qual suele ser frecuentemente causa de su perdicion. Narciso fué convertido en flor para enseñar á la juventud que la hermosura no dura mas que un momento como la flor.
El adivino Tiresias adquirió mucha fama por haber predicho la aventura de Narciso; y Penteo, hijo de Equion, se burló de su predicion, é impidió que sus gentes fuesen á celebrar las fiestas del dios Baco, mandado se le traxesen atado; lo que Baco consintió baxo la forma de Acete, que era uno de sus compañeros.
Penteo fué un rey de Tebas, que quiso impedir la embriaguez en su reyno; y aunque le fué predicho que esto le atraeria el odio de sus vasallos, no dexó por eso de dar todas las disposiciones para extinguir un vicio tan detestable.
El dios del vino baxo la forma de Acete fué llevado ante Penteo, á quien refirió como sus marineros hallaron á Baco, muchacho de particular hermosura cerca de una fuente en la isla de Chîo; y teniéndole dentro de su navio, le prometieron con juramento que le conducirian á Naxos, como deseaba; pero habiendo los marineros dirigido el rumbo á otra parte, los convirtió en delfines.
El delfin es un pez de mar, amigo del hombre, que sigue y aborda las naves quando las ve: esto es lo que dió lugar á Ovidio para decir que los marineros de Acete fueron convertidos en delfines, por haber querido engañar á Baco.
Despues que Baco, baxo la forma de Acete, refirió los prodigios del dios del vino, Penteo le hizo encerrar en una cárcel; pero él escapó sin que nadie le viese, y para vengarse luego de Penteo inspiró á su madre y á sus tias tan gran furor, que le despedazaron cruelmente.
Representan á Baco con tigres, porque es propio del vino causar furor á los que le beben con exceso. Penteo fué despedazado con la mayor impiedad por su madre y sus tias, para hacernos ver que un beodo es capaz de hacer las mayores crueldades, y que se vuelve bestia perdiendo la razon.
Alcitoe y sus hermanas, hijas de Mine, no habiendo participado del castigo de Penteo se burláron de Baco, y en vez de celebrar sus fiestas, trabajáron hilando y texiendo tela; refiriendo para divertirse la fábula de Dercete convertida en pez: la de Semíramis convertida en paloma, y la de Nais tambien en pez: no habian aún acabado, quando fueron convertidas en murciélagos, y sus telas en yedra.
La enseñanza que debemos sacar de esta fábula es que nuestras faltas no quedan impunes; pues siempre se las siguen los correspondientes castigos.
Esta fábula enseña á los jóvenes á no hacer nada sin consentimiento de sus parientes; y hace ver igualmente que algunos padres son causa de la pérdida de sus hijos, oponiéndose indiscretamente á su inclinación.
El sol, que vé ántes que nadie todas las cosas, descubrió el adulterio de Marte y Venus: avisó á Vulcano, y le enseñó el lugar que habian elegido para verse. Este dios fué conmovido de tal manera por esta injuria, que al recibir la noticia se le cayó el martillo de la mano. Hizo luego unas redes sumamente delgadas para cogerlos, y un dia que los dos estaban juntos los envolvió en sus hilos casi imperceptibles, y llamando á todos los dioses se llenó de ignominia para afrentar á su muger.
En la conducta de Vulcano vemos la de muchos maridos que se deshonran ellos mismos haciendo pública la liviandad de sus mugeres.
El Sol se enamoró de Leucotoe, hija de Orcamo rey de Babilonia y de la hermosa Eurinome. Clicia, hermana de Leucotoe, que amaba al Sol, llena de zelos descubrió á su padre la amistad de Leucotoe, de lo qual Órcamo se enfureció tanto que la hizo enterrar viva, sin que pudiera socorrerla el Sol, que la convirtió en el árbol del incienso, y Clicia fué transformada en una flor que siempre está mirando á aquel astro; y por esto la llaman tornasol, ó heliótropio.
Como el árbol del incienso no se cria sino en pais cálido, han fingido que el Sol amó á Leucotoe, y que la convirtió en este árbol. Tambien se ha dicho que Heliotropo era una ninfa que amaba á Apolo, porque esta flor se vuelve siempre al sol, que en la fábula se llama Apolo.
Ovidio por el baño nos manifiesta el deleyte que afemina á los hombres.
Era Juno tan vengativa, que hizo padecer a todos los parientes de Europa. Muchas gentes hay que la imitan exerciendo sus venganzas contra los amigos de los que aborrecen, aunque no los hayan ofendido.
Se representan los infiernos en un lugar oscuro y lleno de fuego. Pluton es su rey: hay tres jueces que son Minos, Eaco y Radamanto: tres furias que tienen serpientes por cabellos y una hacha en la mano. Caron en su barca pasa las almas de los difuntos por los rios Achêronte Cocito y lago Estigio: el Cancervero es el portero. Allí se ve á Ticio que una águila le desgarra y roe las entrañas. Tántalo está en medio de un lago sin poder beber, ni comer de los frutos de un árbol que está sobre su cabeza, en castigo de haber servido á los dioses el cuerpo de su hijo Pelope. Sisifo, por haber engañado á Júpiter en sus amores, está dando vueltas á una piedra; y quantas veces la sube á la cima de la montaña, otras tantas cae hasta el pie de la falda. Ixîon, por haberse atrevido al honor de Juno, está atado á una rueda que dá vueltas sin cesar. Vense, en fin, las cincuenta danaydas, hijas del rey Dánao, que se cansan inútilmente en querer llenar una cuba sin suelo. Colócanse allí tambien los campos elísios, donde habitan los que han vivido con rectitud.
Viéndose Cadmo perseguido de Juno, salió de la ciudad de Tebas, que habia fundado, y se fué á la Iliria con su esposa Hermione, y atribuyendo la causa de sus desgracias al dragon que él habia muerto, pidió á los dioses le transformasen en serpiente: Hermione hizo la misma súplica, y ámbos la consiguiéron.
Acrisio rey de Argos, habiendo sabido que habia de morir á manos de un nieto suyo, que naciera de su hija Dánae, la hizo encerrar en una torre de bronce para privarla de la comunicacion de los hombres, y evitar por este medio la desgracia con que le amenazaba el oráculo; pero esta prevencion le fué inútil, porque Júpiter estaba enamorado de ella, y convirtiéndose en lluvia de oro, entró en la torre, y de su union nació Perseo.
Medusa, hija de Forco y Ceto, era la mayor de las tres Gorgonas: convertia en piedras á todos los que la miraban, y sus cabellos eran hermosísimos. Neptuno se enamoró de ella, y la violentó dentro del templo de Minerva. Esta diosa se irritó tanto, que transformó sus cabellos en culebras. Perseo la cortó la cabeza con la espada que Mercurio le dió, y nació de su sangre el caballo con alas que llaman Pegaso.
Medisa fué de una hermosura tan extraordinaria, que todos quantos la miraban se sorprendian de tal manera que parecian inmóviles. Esto fué causa de que se dixese convertia los hombres en piedras.
Atlas era un gigante de una grandeza y fuerza extraordinarias: en los jardines de su palacio habia árboles que producian manzanas de oro; y el oráculo le predixo que su fruto seria robado por un hijo de Júpiter: por lo que hizo cercar el jardin con grandes y fuertes murallas. Algun tiempo despues Perseo pidió le alojase, y él lo rehusó, y quiso despedir con violencia; pero Perseo mostrándole la cabeza de Medusa, le convirtió en montaña.
Atlas fué un rey de Mauritania que situó su morada sobre la montaña mas elevada de Africa: han fingido que llevaba el cielo sobre sus hombros, porque inventó la esfera. Han dicho tambien que Perseo le convirtió en esta montaña, que por su grandísima altura llaman columna del cielo ó monte Atlas, á causa de servir para observar el curso de los astros.
Despues de cortar Perseo la cabeza á Medusa, y haber convertido á Atlas en monte, se encaminó á Etiopia, donde se enamoró de Andrómeda, hija de Cefeo, que estaba atada con cadenas á un peñasco, expuesta á que la devorase un monstruo marino para castigo de su madre Casiope, que se habia alabado de ser las mas hermosa de las nereidas. Perseo mató al monstruo marino, libró á Andrómeda y se desposó con ella. Algunas ramitas de arbolitos se convirtiéron en coral porque cayéron algunas gotas de sangre de la cabeza de Medusa.
En esta fábula reprehende Ovidio á las mugeres que tienen tanta vanidad de su hermosura, que parece quieren las tengan por diosas; y hace ver tambien en el exemplo de Andrómeda, que los hijos suelen ser freqüentemente castigados por los delitos de sus padres.
Sintiendo Finéo con el mayor extremo que Perseo se desposase con Andrómeda, que le habia sido prometida ántes de exponerla al monstruo marino, fué al palacio de esta princesa para estorbar el desposorio con la muerte de su rival. Resistió Perseo mucho tiempo á sus esfuerzos con el socorro de Palas, que le cubrió con su escudo; pero viéndose al fin obligado á ceder á la multitud, se sirvió de la cabeza de Medusa, y convirtió en mármol á Finéo y todos sus compañeros.
En Finéo se nos presenta un sedicioso que pretende turbar no solo el reposo de una familia, sino de todo un reyno. La diosa Palas; esto es, los dioses, se declaráron contra él, y fué convertido en estátua de mármol. Lo qual significa que le pusiéron en estado de no poder ofender á nadie.
Polidecto er rey de la isla de Serifa, adonde Perseo y Dánae fuéron llevados por los vientos, quando Acrisio los hizo meter en el cofre que echó al mar. Este rey á fin de gozar libremente á Dánae, envió á Perseo á cortar la cabeza á Medusa, lo que executó con mucho valor y se la traxo; pero no queriendo Polidecto creer fuese la cabeza de Medusa, se puso á observarla, y fué convertido en piedra.
Como esta transformacion de Polidecto en piedra es parecida á las precedentes, no se la puede dar explicacion particular, y basta repetir que la cabeza de Medusa era un objeto de tanta admiracion, que quantos la veían con cuidado, se quedaban asombrados é inmóviles como estátuas.
Un dia que las musas iban al monte Parnaso, sobrevino una recia lluvia que las obligó á refugiarse en el palacio de Pirenéo rey de Tracia. Luego que cesó el agua quisiéron continuar su camino; pero el impúdico rey hizo cerrar todas las puertas con intento de violarlas; ellas se pusiéron alas y escapáron volando. Pirenéo para seguirlas subió á una torre alta y se echó al ayre creyendo volar como ellas; pero cayó y se rompió la cabeza.
En las musas nos representan los poetas las ciencias: las ponen sobre el monte Parnaso, para mostrarnos que las gentes de letras deben buscar los lugares solitarios. Ellas resistiéron á Pirenéo porque amaban la castidad, y este rey pereció miserablemente apénas quiso poner en execucion su depravado intento; lo qual nos manifiesta que los malos se pierden freqüentemente donde creen hallar placeres.
Piero, rey de Macedonia, tenia nueve hijas que creían cantar mejor y ser mas sabias que las nueve musas, tanto que se atrevieron á desafiarlas; pero en castigo de su temeridad fueron convertidas en urracas. Eripe su madre estuvo en peligro de perder la vida las nueve veces que estuvo de parto.
Las Piérides representan á los poetas charlatanes é ignorantes, que presumiendo mucho sin talento ni instruccion, suelen criticar á los hombres mas sabios. Fuéron convertidas en urracas porque tenian ya la charlatanería de estas aves.
Tiféo era uno de los gigantes que intentaron apoderarse del cielo, y fuéron confundidos por Júpiter, el qual se enterró en Sicilia: su cabeza está debaxo del monte Etna, y las otras partes de su cuerpo debaxo de otras montañas de la misma isla. Ha hecho algunas veces tan grandes esfuerzos para salir de un estado tan penoso, que ha temblado Sicilia.
El fuego que está debaxo del monte Etna, y en otras partes de Sicilia, puede haber sido causa de que algunas veces se ha hundido la tierra: se atribuye á Tiféo, para darnos á entender que la malicia de los hombres nos atrae este castigo, y que Dios está cerca de precipitarnos en el infierno si no dexamos de ofenderle.
Temiendo Pluton que los terremotos de Sicilia causasen algun estrago en su imperio, fué á visitar esta isla en un carro tirado de caballos negros, y como la recorriese toda, halló á Proserpina, hija de Júpiter y de Ceres, que estaba cogiendo flores con otras Ninfas. Apénas la vió quando quedó prendado de ella, y la robó; pero no bastándola las fuerzas para resistirse, fué convertida en fuente.
Ceres es la diosa de las semillas y de la agricultura: Sicilia es el pais mas fértil en granos de todo el mundo; y habiendo tenido un año estéril, fingieron que Pluton, que estaba baxo la tierra, habia robado á Proserpina, que es el grano que habian sembrado y no habia fermentado.
Buscando Ceres á su hija Proserpina, que Pluton habia robado, recorrió muchos paises, y se cansó en extremo. Un dia que padecia gran sed llamó á la puerta de una cabaña para pedir agua, y una buena vieja llamada Mesie se la dió con mucho agrado, ofreciéndola ademas puches. La diosa comió y bebió con apetito, y un niño llamado Stelio que lo estaba viendo se burló de ella, y Ceres para castigarle le tiró á la cara parte de las puches, convirtiéndole en tarántula.
Esta fábula se inventó para manifestar que no debemos burlarnos de nadie, ni sufrir este delito en los niños; enseñándoles á compadecer los defectos del próximo, porque sinó, se acostumbran despues á ser burlones, insolentes y perversos.
No habiendo podido Ceres hallar á Proserpina, volvió á Sicilia, donde la ninfa Aretusa la dixo como Pluton la habia robado. Ceres fué luego á lamentarse á Júpiter del robo de su hija, y este dios la prometió volvería Proserpina al mundo, con tal que no hubiese comido nada en los infiernos. Proserpina habia, por desgracia, cogido una granada, y sin advertirlo comido siete granos. Ascalafo lo habia visto, y lo declaró, impidiendo así que saliese de los infiernos. Proserpina se irritó tanto de su indiscrecion, que le convirtió en buho, páxaro que jamas anuncia mas que infortunios.
Debemos aprender en el exemplo de Ascalafo á no decir nunca cosa que pueda atraernos el odio de nadie; porque en adelante será castigada nuestra indiscrecion comparándonos á los buhos.
Las sirenas, hijas del rio Achêloo, y de la musa Caliope, eran grandes amigas de Proserpina, y suplicáron á los dioses las convirtiesen en peces, á fin de poder buscar á su amiga por mar y por tierra: fuélas concedida su solicitud sin mudarlas la vista ni la voz, porque eran lindas y cantaban con mucha dulzura.
Dánse á esta fábula muchos sentidos, y no valiéndose de ninguno, admiro en ella la amistad que obligó á las sirenas á convertirse en peces para buscar á su compañera. No vemos hoy amistades tan firmes; y esto es lo que me parece quiso Ovidio hacernos observar.
La controversia de Ceres con Pluton fué terminada por Júpiter, ordenando que Proserpina viviese seis meses con su madre en la tierra, y otros seis meses en el infierno con su marido, Ceres salió fuera de sí de gozo al oir la sentencia, y luego quiso saber la aventura de Aretusa. Esta ninfa la refirió como el rio Alfeo se enamoró de ella viéndola bañar: que la persiguió mucho tiempo, y que estuvo cerca de caer en sus manos, si Diana, que la cubrió con una nube, no la hubiera convertido en fuente.
Entiéndase por la hija de Ceres el trigo que está seis meses sobre la tierra, y casi otro tanto debaxo. En quanto á Aretusa y Alfeo, es una ficcion inventada para enseñarnos que todas las aguas de las fuentes vienen de la mar por conductos subterraneos, y vuelven á él por medio de los rios.
Ceres enseñó la agricultura á Triptolemo, y le envió en su carro para restablecerla en todo el mundo: Linco, rey de Sicilia, intentó matarle para atribuirse la gloria de haber dado á su patria buenas cosechas; pero Ceres impidió sus deseos convirtiendo al tirano en lince.
Triptolemo era hijo de un rey de Grecia, el primero de su patria que labró la tierra y escribió sobre la agricultura; por esto han fingido que le instruyó Ceres, diosa de las semillas.
Aracnea, hija de Idmon, fué célebre en toda la Lidia por sus bordaduras; pero se envaneció tanto con su habilidad, que desafió á Palas sobre quien bordaria mejor. La diosa admitió el desafio; pero viendo que el bordado de Aracnea era mejor que el suyo, se enfureció tanto que rasgó la tela, y la dió algunos golpes en los ojos. Aracnea por huir del mal tratamiento se iba á ahorcar; Palas la sostuvo en el ayre, y la convirtió en araña.
Esta fábula enseña á los jóvenes á no menospreciar á quien los instruye, y los advierte que aun quando salgan mas hábiles que sus maestros, no deben vanagloriarse de ello.
Niobe, hija de Tántalo rey de Tebas, se mostraba tan orgullosa de tener catorce hijos, que intentó impedir se hiciesen sacrificios á Latona. Apolo y Diana, hijos de la diosa, matáron á flechazos á los catorce hijos de Niobe, por vengar el insulto hecho á su madre: Apolo á siete que eran varones; y Diana á siete hembras. Niobe fué transformada en peñasco.
El mas insoportable de los vicios de los hombres, y el que ha castigado Dios con mayor severidad, es la soberbia. Las mugeres no deben vanagloriarse de su fecundidad; pues debemos reconocer que todos los bienes que poseemos nos vienen del cielo.
Habiendo Latona corrido todo el mundo para evitar el enojo de Juno, llegó al fin á la Licia con extremo desfallecimiento, y al pasar cerca de una laguna se llegó á beber; pero unos aldeanos, que estaban arrancando juncos, se lo impidiéron enturbiando el agua, de lo qual irritada la diosa se quejó a Júpiter, y los convirtió en ranas.
En esta fábula nos presenta Ovidio unos aldeanos, que por haber cometido una grosería, fueron convertidos en unos animales ridículos: befa que deberian sufrir todos los que no usan de cortesanía con sus semejantes.
Marsias desafió á Apolo sobre quien tocaria mejor la flauta, y habiendo ganado este dios, le desolló. Las ninfas, los sátiros, los faunos y todas las divinidades campestres lloraron su muerte, y vertiéron tantas lágrimas, que de ellas se formó el rio Marsias que riega la Frigia.
Los tocadores de flauta representan los poetas, y como Marsias la tocaba mal, fingiéron que Apolo, dios de las ciencias, le desolló, manifestando su insuficiencia. Han dicho tambien que se formó un rio de lágrimas de los que sintieron su infortunio, para manifestarnos que son muchos los ignorantes.
Tántalo, hijo de Júpiter, rey de Frigia, habiendo un día recibido á los dioses en su palacio, les dió á comer á su propio hijo Pelope, hecho pedazos y aderezado apetitosamente. Luego que Júpiter advirtió semejante atrocidad resucitó á Pelope, y le puso una espalda de marfil en lugar de la suya, que se habia comido Ceres, para que no quedase con aquel defecto.
Algunos historiadores dicen que Tántalo fué un hombre virtuoso, que consagró su hijo al servicio de los dioses, en testimonio de su amor; lo qual se parece á la historia de Isac. Otros al contrario, creen que Tántalo representa un avaro que dexa perder miserablemente á su hijo por no gastar en educarle bien.
Tereo, rey de Tracia, se enamoró de Filomela, hermana de Progne su muger, y despues de violentarla la cortó la lengua para impedir se quejase; pero ella hizo saber á su hermana la afrenta y la crueldad de Tereo por medio de un lienzo en que lo pintó, y apenas Progne entendió la maldad de su marido, degolló á su hijo Itis, y se le dió á comer á su padre. Todos fueron convertidos en aves, Tereo en gabilan, Progne en golondrina, é Itis en faisan.
Ovidio inspira en esta fábula el horror que nos deben causar las pasiones desarregladas; pues conducen á los hombres á cometer las mas terribles crueldades.
El viento Bóreas ó Aquilon se enamoró de Oritia, hija de Ericteo, rey de Atenas, y la pidió á su padre en matrimonio; pero no habiéndosela concedido la robó y llevó á Tracia, donde tuvo dos hijos gemelos, llamados Calais y Cetes, parecidos á su padre por las alas, y á su madre por la hermosura, los quales hicieron el viage de los argonautas con el famoso Jason.
Un hombre llamado Bóreas robó á Oritia con tanta sutileza y celeridad, que se creyó la habia llevado el viento Bóreas.
Las Harpias son monstruos que se representan con cara y cuello de mugeres hermosas, cuerpo de buytre, garras en pies y manos, y orejas de oso: tres se llaman Aello, Osipete y Celeno; son hijas del océano y de la tierra. Los dioses las enviaron á atormentar á Fineo, rey de Arcadia, y lo hacian ensuciándole toda la comida que le servian.
Fineo nos representa un hombre rico y caduco: las harpias son sus hijas á quienes se vió obligado á dexar todos sus bienes; y como cada una de ellas los queria para sí, las llamaron las harpias, que quiere decir ambiciosas.
Frixo y Hele su hermana, hijos de Atamante, no pudiendo sufrir el mal tratamiento de su madrastra Ino, determinaron dexar su patria, y montando en un carnero, cuyo vellon era de oro, se entraron en el mar. Hele se anegó en el estrecho, que despues se ha llamado Helesponto; y Frixo, habiendo llegado con felicidad á la isla de Colcos, consagró al dios Marte el vellocino de oro.
Frixo, habiendo sufrido mucho tiempo el mal tratamiento de su madrastra Ino, resolvió escaparse y llevar las riquezas de su padre Atamante: escapóse en efecto en un navío llamado carnero, y luego que llegó á Colcos ofreció sacrificio. Esta es la historia que se saca del asunto de la fábula.
Cincuenta y quatro argonautas pasaron de Tesalia á Colcos baxo el mando de Jason para la conquista del vellocino de oro. Medéa, hija de Cetes, que sabia la mágia, se enamoró de Jason, y le prometió revelarle algunos secretos para que pudiese lograr su fin, con tal que se desposase despues con ella. Dióle en efecto yerbas, con las quales adormeció y mató á los toros y dragon que guardaban el vellocino, y se lo llevó con Medéa, casándose luego con ella.
Créese escrita esta fábula contra los alquimistas, que despues de muchas investigaciones y trabajos, hallan solo una quimera en lugar de la piedra filosofal.
Luego que Jason llegó á Grecia con Medéa hicieron todos solemnísimas fiestas públicas para celebrar su vuelta y victoria; ménos su padre Eson, que no pudo manifestar su regocijo á causa de estar muy anciano y lleno de incomodidades. Medéa, á intercesion de Jason, le rejuveneció conservándole la memoria de las cosas pasadas.
Medéa era muy sabia en la medicina, arte que suele alargar nuestros dias; y curar nuestras enfermedades. Esto es lo que Ovidio quiso decirnos en esta fábula.
Viendo Baco que Eson habia sido rejuvenecido, pidió á Medéa la misma gracia para las ninfas que le habian criado. Medéa se la concedió, y retirándose á casa de Pelias, tio y enemigo de Jason, las rejuveneció cociendo un carnerno viejo, degollado y cortado la cabeza, con el jugo de algunas yerbas. Persuadió luego á las hijas de Pelias hiciesen lo mismo para rejuvenecer á su padre; y ellas creyendo remozarle, le mataron.
Esta fábula es una continuacion de la precedente, demostrándonos que la medicina y las yerbas tienen propiedades para conservar y restablecer nuestra salud; y al mismo tiempo manifiesta que obran los remedios segun se aplican: si con conocimiento y á tiempo, bien; y al contrario.
El hijo de la ninfa Hiria, habiendo visto un novillo de un amigo suyo que le gustó en extremo, se lo pidió, y no habiéndoselo concedido, se tiró desde lo alto de un peñasco, y fué convertido en cisne. Su madre creyéndole muerto, lloró tanto, que se deshizo en lágrimas, y fué convertida en una laguna que tiene su nombre.
Ovidio reprehende en esta fábula á los jóvenes que tienen envidia de todo lo que ven á los otros, y que se enfurecen quando no se lo conceden.
Estando la isla de Egina despoblada por la peste, las hormigas fueron transformadas en hombres pequeños, que se llamaron mirmidones. Júpiter hizo este prodigio en favor de Eaco su hijo, que era de aquel pais.
Dícese que los mirmidones eran hombres muy pequeños y laboriosos, que vivian en cabernas, y recogian durante el Estío su manutencion para el Invierno como las hormigas.
Céfalo fué arrebatado por la Aurora, á causa de su hermosura; y no habiendo querido detenerse con ella, se fué disfrazado á ver á su muger Pocris para probar su fidelidad: despues de bastante resistencia, no creyendo Pocris fuese su marido, condescendió á su instancia; y tuvo luego tanto arrepentimiento de su delito, que se retiró á los bosques. Vivió en ellos algun tiempo; pero Céfalo la hizo volver, y ella le regaló un perro y un dardo; este dardo tenia la virtud de herir infaliblemente de qualquiera manera que se tirase: el perro fué convertido en piedra estando cazando una bestia salvage que Temis habia enviado para hacer estrago alrededor de la ciudad de Tebas.
En esta fábula se aconseja á los casados á no probar la fidelidad de sus mugeres, porque es mejor tenerlas en opinion de virtuosas, que exponerse á saber que son infieles.
Habiendo Pocris vivido mucho tiempo en paz con su marido, llegó á ser zelosa, y se escondió en un bosque para observarle quando fuese á caza: vió Céfalo moverse las hojas donde estaba escondida, y creyendo fuese la bestia salvage, la mató con el mismo dardo que ella le habia regalado.
Esta fábula se dirige á los zelosos para obligarles á corregirse, porque los zelos turban la paz y cariño conyugal, ocasionando grandísimos males.
Scila, hija de Niso rey de Megara, fué traidora á su padre para obligar á que la amase Minos que los tenia sitiados: vióle desde lo alto de una torre, y habiéndose enamorado de él, cortó el pelo rubio que tenia Niso en la cabeza, en que estaba cifrada la duracion de su reyno y vida. Llevó despues el cabello á su querido, el qual horrorizado de semejante traicion no quiso recibirla; por lo que desesperada, se precipitó y fué convertida en calandria. Su padre, que la seguia para castigarla, fué convertido en gabilan.
Dos cosas se pueden considerar en esta fábula: la primera que los que se abandonan á la pasion del amor son capaces de todo: la segunda, que la traicion es aborrecible á los mismos que tienen interes en ella. Por el cabello quiso el poeta significar el secreto, el qual siendo descubierto al enemigo le es fácil la victoria.
Pasifae, muger de Minos, se enamoró de un toro, y concibió un monstruo que era medio hombre y medio toro. Dícese que le encerraron en el laberinto que Dédalo habia fabricado en Creta.
Un capitan de Minos, llamado Tauro, dió motivo á esta fábula, porque Pasifae enamorada de él, concibió un niño en ausencia de su marido. Ovidio para hacer públicos sus amores escribió la fábula del Minotauro.
Despues que Minos venció á los Atenienses, les obligó á que de nueve en nueve años le enviasen siete jóvenes para que los devorase el Minotauro: tocó la suerte á Teséo, que mató al monstruo, y salió del laberinto por medio de Ariadna, que le habia dado un ovillo de hilo para que al entrar atase un cabo á la puerta, y despues le sirviese para hallar la salida. Ariadna creyó obligarle con este favor á que se desposase con ella; pero él la dexó en la isla de Naxos, que estaba desierta. Baco la halló muy afligida, la recibió por muger, y colocó su corona entre las constelaciones.
Este laberinto nos figura los desórdenes de esta vida, donde no estamos seguros sino por el hilo de la sabiduría y la razon, que deben guiarnos en todo.
Dédalo, escultor y arquitecto ingeniosísimo, estaba preso en Creta, y se escapó á Sicilia por medio de unas alas de cera que hizo. A su hijo Icaro, que voló hasta cerca del Sol, se le derritieron las alas, y cayó al mar, que ha sido despues llamado Icario: Dédalo habia precipitado en el mar á su sobrino Talo temiendo le aventajase, y Minerva lo convirtió en perdiz. Esta ave, acordándose de su caida, no se atreve á levantar el vuelo.
Envidioso Dédalo de su sobrino, le precipitó en el mar y se refugió á Creta para evitar su castigo: sirvió á Pasifae en sus amores con Tauro: Minos lo hizo poner preso por esta causa, y él se escapó en un barco que, para que anduviese con mas velocidad, le puso velas, las quales no eran aún conocidas. Icaro, que le seguia en una falúa, se fué á fondo por no haber seguido el rumbo de su padre.
Olvidóse una vez Meleagro de sacrificar á Diana, y esta diosa en venganza envió un jabalí para que asolase todo el pais de Calidonia: Meleagro hizo juntar todos los señores de la Grecia para matarle: Atalanta, hija de Casio, rey de Acadia, fué la primera que le hirió, y despues de muerto la ofreció Meleagro la cabeza en recompensa de su destreza y valor. Envidiosos los tios de Meleagro, solicitaron se les diese á ellos; pero aquel príncipe los mató, y Altea, madre de Meleagro, para vengarlos quemó un tizon fatal, cuyo fin fué el de la vida de Meleagro. Las hermanas de éste lloraron tanto su muerte, que fueron convertidas en gallinas.
Los tios de Meleagro, envidiosos del premio que Atalanta habia obtenido por su servicio, intentaron quitárselo con violencia. Esto es lo que hacen freqüentemente los envidiosos, y contra estos dirige el poeta la fábula.
El rio Aqueloó se enamoró de la ninfa Perimele, la qual viéndose solicitada por mucho tiempo, condescendió á sus ruegos. Habiendo Hipodomante descubierto los amores de su hija, se irritó tanto, que desde lo alto de una peña la precipitó al mar. Neptuno á ruegos de Aqueloó la convirtió en isla: cinco nayades habian sido tambien convertidas en islas por haber despreciado al rio Aqueloó.
Ovidio en esta fábula disfraza agradablemente las obras de la naturaleza; pues el rio Aqueloó, con sus inundaciones ha formado las islas del mar, que están enfrente de su embocadura, y se llaman Equínades.
Júpiter y Mercurio anduvieron por la Frigia en forma humana, y fueron despreciados de todos; solo Filemon y su muger Baucis, aunque pobres, les dieron buena acogida. Los dioses en recompensa convirtieron su cabaña en un templo, y á ellos en árboles, despues de gozar larga y feliz vida.
Por esta narracion vemos quan agradable es á Dios la hospitalidad: los que poseen mayores riquezas son por lo comun los mas duros con los pobres; pero su inhumanidad no queda impune, pues muy comunmente se ve que son castigados con la pérdida de los bienes que aman con tanta pasion; quando al contrario la hospitalidad obtiene muchas veces recompensas temporales.
Proteo, hijo del Océano, tenia las llaves del mar, y guardaba los caballos de Neptuno: sabia lo pasado, y anunciaba lo por venir: mudaba quantas formas queria, principalmente la de leon, de toro y de jabalí. Aristeo, hijo de Cirene, le consultó para saber el medio de hallar sus abejas, que habia perdido, y que estimaba extremadamente.
Proteo era un rey de Egipto, que tenia sus estados sobre el mar, y que para hacerse temer mudaba de trages vistiendose de pieles de leon, de toro y de jabalí; y esto dió asunto á la fábula.
Erisicton habiendo arrasado un monte consagrado á los dioses, fué castigado con un hambre horrible que nunca podia saciar. Metra su hija para socorrerle, rogó á Neptuno la concediese la virtud de trasformarse como Proteo, y el dios que ántes la habia amado se lo concedió. Su padre la vendió al instante por plata: ella tomó otra forma, y así la revendió muchas veces; pero habiendo descubierto los dioses el ardid, y no hallando con que saciarse, se comió á sí mismo.
Erisicton era un pródigo, que despues de haber consumido sus bienes, vivia á expensas de su crédito, y cometia mil crímenes, hasta que descubiertos sus engaños, y no teniendo de que subsistir, se mató á sí mismo.
Pidieron muchos á Deyanira, hija de Oenéo rey de Calidonia para esposa, y su padre la prometió al que venciese á los otros en combate. Aqueloó se convirtió en toro para luchar con Hércules, y éste le abatió arrancándole un cuerno. Las nayades le recogieron y le llenaron de frutos, por lo qual es llamado el cuerno de la abundancia.
Dícese que el rio Aqueloó es hijo del Océano, porque de él dimanan todos los rios. Hércules, que representa la fuerza, le venció porque halló el medio de impedir las inundaciones, y de hacer fértil un pais que ántes estaba destruido.
Luego que Hércules venció á Aqueloó, consiguió á Deyanira. El Centauro Neso, despues de pasarla el rio Eveno, intentó robarla, y penetrando Hércules su designio le disparó una flecha. Viéndose Neso herido de muerte, dió su camisa llena de sangre á Deyanira, asegurándola que tenia virtud para hacer que su marido no amase jamas á ninguna otra muger. La camisa estaba envenenada, y apénas se la puso Hércules murió.
Debemos aprender de esta fábula á no creer de ligero á las gentes cuyo interior no penetramos.
Creyendo Deyanira que su marido estaba enamorado de Io, le envió con Licas la camisa que el Centauro Neso la habia dado, y apénas Hércules se la puso, sintió abrasarse de un fuego tan violento, que arrojó á Licas al mar. Tetis convirtió al inocente criado en peñasco.
La aventura de Licas nos enseña que es peligroso servir á los Grandes, porque suelen castigar las menores faltas con gran rigor.
No queriendo Hércules morir del veneno, hizo una pira de leña sobre el monte Eta, y habiendo tendido sobre ella la piel del leon Neméo, se echó encima, colocó la clava baxo su cabeza, mandó a Filoctete pegase fuego á todo, y se abrasó. Los dioses le inmortalizaron por sus hazañas, recibiéndole en el cielo, donde se casó con Hebe, diosa de la juventud.
Hércules es inmortalizado por sus trabajos, para manifestarnos que por ellos conseguimos el cielo, y que la virtud jamas queda sin recompensa.
Lucina era la que presidia los partos. Juno la suplicó hiciese que Alcmene no pariese felizmente de Hércules: Galantis, su criada, viendo que Lucina en forma de vieja apretaba á su ama las rodillas para que no pariese, aparentando regocijo, dixo á voces que su ama habia dado á luz un niño: oyéndolo Lucina, soltó á Alcmene, y ésta parió inmediatamente; de lo qual irritada Juno, convirtió á Galantis en comadreja.
Galantis mintió para que su ama pariese; pero como no es permitido hacer mal, aunque de ello resulte bien, en castigo de su engaño se dice que fué convertida en comadreja.
Una ninfa huyendo de las caricias de Priapo fué convertida en un árbol llamado Lotos. Paseándose Driope cerca de una laguna, en cuya orilla estaba este árbol, rompió una ramilla para divertir á su hijo, y al instante fué convertida en el mismo árbol, cuyo fruto hace olvidar todas las cosas.
Driope es convertida en árbol para enseñarnos que no debemos jamas tocar lo que no conocemos; pues á menudo suelen cosas al parecer leves acarrear grandes desastres.
Biblis se enamoró de su hermano Cauno: éste huyó de su patria para evitar la persecucion, y ella le siguió hasta Caria, donde no consiguiendo su depravado deseo, lloró tanto que fué convertida en fuente.
Ovidio en el exemplo de Cauno nos hace ver quan aborrecible es el incesto. Convirtióse Biblis en fuente para manifestarnos que jamas es bastante llorado un crímen semejante.
Habiendo Ligdo mandado á su muger Teletusa, que si paria hija la matase, no tuvo valor para ello, y la hizo vestir como niño llamándola Ifis. Dícese que luego que fué jóven mudó de sexô con el favor de Isis, y despues de tributar sacrificios á Venus, se desposó con Janta.
Jamás debemos obedecer preceptos injustos. Teletusa fué premiada por haber encubierto el sexô de su hija; y todos estamos obligados á imitarla, impidiendo el mal siempre que esté en nuestra mano.
Eurídice fué mordida en un talon por una serpiente, y murió el dia de su boda. Orfeo, su esposo, fué á buscarla á los infiernos, y envelesó á las divinidades infernales con su voz y su lira, de modo que le concedieron sacasa á Eurídice, con la condicion de que no habia de mirarla hasta que saliese del distrito de los infiernos; pero no habiendo podido abstenerse de verla, fué llevada segunda vez; y Orfeo desesperado de su infortunio, se retiró sobre el monte Hemo.
Preséntasenos aquí un exemplo de la fe conyugal, y se manifiesta al mismo tiempo como pierden muchos el fruto de sus afanes por quererlo coger ántes de tiempo. Si Orfeo hubiese tenido paciencia, hubiera gozado mas de la compañía de Eurídice.
Luego que Orfeo se retiró á los desiertos, tocó su lira con tanto primor, que sorprendió á los peñascos, á los animales y á los árboles: el pino, que se hallaba entre estos, era árbol nuevo, en el qual se habia convertido Atis, sacerdote de Cibeles.
El poeta ha querido enseñarnos en esta fábula el poder de la música, y la poesía, é inclinarnos por este medio á la aficion de estas dos artes maravillosas.
Cipariso domesticó á un ciervo que estimaba extremadamente, y habiéndole muerto en la caza sin querer, le entró tanta afliccion, que estuvo á punto de quitarse la vida; pero Apolo, que le amaba, se lo impidió, y le convirtió en cipres, que es árbol que se pone en los funerales en señal de dolor.
No debemos aficionarnos á cosas pasageras, pues se nos privan cuando ménos lo pensamos, y porque la afliccion que se nos sigue despues, es inútil.
Prendado Júpiter de la inocencia del jóven Ganimedes, se convirtió en águila, y se le llevó al cielo para que le sirviese la copa. Hebe, diosa de la juventud, hija de Juno, y sin padre, hacia ántes el oficio de servir á Júpiter el nectar y la ambrosía.
Han fingido que Ganimedes, jóven príncipe sumamente virtuoso, fué arrebatado por una águila á causa de su sabiduría, para excitar á los jóvenes á profesar la virtud, que nos hace amigos de Dios.
Jacinto era un jóven perfecto: Apolo le amaba con extremo, y un dia estando jugando á la raqueta, le mató inadvertidamente, de lo qual tuvo un gran disgusto: su sangre fué convertida en la flor de su nombre.
Apolo hace nacer las flores en la primavera, y las hace morir con el calor del estío: de aquí han tomado ocasion para decir que hizo morir á Jacinto.
Los Cerastos, habitantes de Chipre, sacrificaban á todos los extrangeros que pasaban por su pais. Venus, á quian estaba consagrada esta isla, no pudiendo sufrir su inhumanidad, los convirtió en toros.
El poeta finge que los habitantes de Chipre fuéron convertidos en toros, para echarlos en cara que eran mas feroces que estos animales.
Las Propetidas eran una jóvenes que decian que Venus no era diosa; la qual en castigo de su temeridad encendió en su corazon el fuego de la lascivia, con lo qual se abandonáron á la disolucion, y luego fueron convertidas en peñas.
Esta fábula nos manifiesta que los que se abandonan á los placeres de la carne, se entorpecen de manera que se quedan insensibles como las peñas.
Pigmalion era un escultor que al ver las torpezas de las Propetidas concibió tal aborrecimiento á las mugeres, que resolvió no casarse jamas. Hizo luego una estatua de marfil que representaba á Venus, y se enamoró de ella con tal locura, que la trataba como si fuese persona humana. Un dia suplicó á la diosa del amor que se la animase, y la diosa se lo concedió. Casóse luego con ella, y tuvo un hijo llamado Pafo, que fundó la ciudad de Pafos.
Esta fábula quiere darnos á entender que con la vigilancia y la sumision se consigue rendir el corazon mas insensible del mundo.
Enamoróse Mirra de su padre Ciniro, rey de Chipre, y halló medio de engañarle y satisfacer su apetito. Apénas Ciniro supo el engaño quiso matar á su hija; pero esta escapó de sus manos, y despues suplicó á los dioses la castigasen, los quales la convirtiéron en el árbol de su nombre, sin daño del hijo de que estaba en cinta, que se llamó Adonis.
El delito del incesto debe causar horror á todos, y si alguno por desgracia le ha cometido, debe arrepentirse como Mirra, y pedir el castigo ó penitencia debidos á un crímen tan exêcrable.
Adonis, hijo de Mirra, fué amado de Venus con la mayor ternura á causa de su extremada belleza. Un dia estando cazando echó sus perros á un jabalí que habia atravesado con una flecha, y el animal se volvió contra él con la mayor furia y le mató. La diosa le convirtió en flor.
Los hombres mas hermosos no son regularmente los mas animosos, ni mas fuertes. Adonis fué convertido en flor para enseñarnos que la belleza es de corta duracion.
Atalanta, hija de Esquineo, fué solicitada en matrimonio por muchos, y su padre la ofreció al que la ganase en correr, porque lo hacia con una celeridad extraordinaria. Hipomenes se presentó, y Venus le entregó tres manzanas de oro, para que arrojándolas en la carrera una tras otra la venciese: en efecto, Atalanta se baxó á cogerlas, con lo qual se adelantó Hipomenes, ganó, y se casó con ella. Pero no habiendo tributado á Venus las gracias por su auxîlio convirtió al ingrato en leon y á Atalante en leona.
El que cierra los ojos al resplandor del oro resistirá todas las otras tentaciones. Por mas prudente que sea una muger, si ama con exceso el dinero, triunfarán de su virtud; pues el que conozca su flaqueza, si es liberal, se familiarizará con ella á fuerza de dádivas, que á la prueba de esta batería no se halla defensa. La torre de Danae, cuidada por tres guardas vigilantes, no pudo defenderse de una lluvia de oro; y la ligereza de Atalanta se cortó por el brillo de este mismo metal.
Habiendo Orféo perdido enteramente á Eurídice, aborreció con tan grande extremo á las mugeres, que irritadas las de Tracia de su desprecio, le quitaron la vida durante las fiestas de Baco, y este dios las convirtió en árboles.
No debemos tener ni descubrir odio á persona alguna; pues no hay enemigo, por pequeño que sea, que le falte ocasion de hacernos daño. Esto es lo que la fábula nos enseña.
Midas era un rey de Frigia, de ningun talento y extremadamente avaro: los aldeanos le presentaron á Sileno, y él se le volvió á Baco: deseoso éste de corresponder al beneficio, ofreció concederle quanto pidiese. Midas pidió le diese virtud para convertir en oro quanto tocase, y así le fué otorgado; pero viendo despues que hasta los alimentos se le convertian en oro, suplicó á Baco le quitase la virtud, y lo consiguió lavándose las manos en el rio Pactolo. Habiendo opinado que la flauta del dios Pan era mas grata á sus oidos que la lyra de Apolo, fué castigado por este dios dándole orejas de asno.
Midas, para satisfacer su avaricia juntando dinero, lo vendió todo; por esto le atribuyéron el poder de convertirlo todo en oro; y como no tenia talento alguno le aplican las orejas de asno, insignia de la estupidez.
El barbero de Midas, quando le rasuraba la cabeza, notaba que tenia orejas de asno, y no se atrevia á decirlo á nadie por temor de ser castigado; pero viniéndole gran deseo de publicarlo, se fué á un lugar oculto, hizo un hoyo en la tierra, y dixo en él lo que habia notado en la cabeza de Midas: cubrió luego el hoyo con tierra, y se retiró. Despues naciéron cañas en el mismo lugar, que quando las agitaba el ayre publicaban que Midas tenia orejas de asno.
Esta fábula es una advertencia á los grandes señores para que se guarden de que nadie les vea obrar cosa alguna que no sea digna de su clase; porque aunque no haya quien se atreva á decirles sus defectos cara á cara, no falta quien los haga públicos. Las cañas son las plumas de los historiadores, que no disimulan nada.
Apolo y Neptuno disfrazados se concertaron con el rey Laomedonte para fabricar los muros de Troya mediante cierto estipendio; mas resistiéndose Laomedonte á satisfacerlo, acabada la obra, envió Neptuno un monstruo marino que destruyó todo el pais. Hesione fué expuesta á su ferocidad de órden del oráculo, y Hércules la libertó. Viendo despues que Laomedonte no le daba ninguna muestra de agradecimiento, arruinó la ciudad de Troya, se llevó á Hesione, y la casó con Telamon.
Por el disfraz de Apolo y Neptuno se nos quiere dar á entender que nada se hace en el mundo que no sea disposicion de Dios; y por la destruccion de Troya, que los males que Dios nos envia son regularmente castigo de nuestra ingratitud.
Tetis, diosa del mar, fué amada de Júpiter; pero no quiso esposarse con ella á causa de haber predicho el oráculo que daria á luz un hijo que seria mucho mayor que su padre. Obligó á Peléo á que se casase con ella, porque la habia sorprendido, hallándola dormida, y á ella que le recibiese por marido, no obstante que mudó varias formas para resistirse. De esta union salió el valeroso Aquiles.
Han fingido que Tetis mudó diferentes formas para evitar su casamiento con Peléo, á fin de enseñarnos que las mugeres saben ocultar sus ideas, y usar de artificios quando quieren conseguir algun fin.
Quione era una ninfa amada de Apolo y de Mercurio: tuvo dos hijos, el uno llamado Tilamon, que pasó por hijo de Apolo, porque cantaba perfectamente: el otro, llamado Autólico, se atribuía á Mercurio á causa de su sutileza. Quione cobró tanto orgullo de verse madre de estos dos hijos, que osó anteponerse á Diana; y esta diosa la mató de un flechazo que la traspasó la lengua. Dedalion su padre se precipitó desde lo alto del monte Parnaso, y fué convertido en alcon.
Ovidio por las inclinaciones diferentes de los hijos de Quione, quiso manifestar que regularmente los hijos tienen las mismas inclinaciones que su padre; y que naturaleza suele regularmente observar esta ley. Dedalion era un tirano que hasta despues de transformado conservó su crueldad.
Ceix hizo un viage para ir á consultar el oráculo, y á su vuelta pereció en el mar: Alcione, su esposa, rogaba diariamente á Juno le volviese con felicidad. La diosa envió á Morféo durante la noche para que la diese noticia del naufragio: apénas Alcione oyó la desgracia, se fué á la orilla del mar donde se habia despedido de Ceix, y viendo á lo lejos fluctuar el cadáver sobre las aguas, se arrojó á ellas, y ámbos fueron convertidos en alcones. Estas aves hacen sus nidos sobre el mar, y se observa que mientras empollan estan las aguas tranquilas.
Como Ceix y Alcione se amaban extremadamente, han fingido que se convirtieron en alcones, aves que nunca se separan el macho y la hembra. Por esta fábula quiso Ovidio inspirar á los casados una recíproca perpetua amistad.
Huyendo la ninfa Hesperia de Esaco, hijo de Priamo, que estaba enamorado de ella, fué mordida por una culebra, y murió en el campo: Esaco se afligió tanto de haber sido causa de su muerte, que se precipitó en el mar, y fué convertido en cuervo.
La culebra nos presenta la maledicencia, que jamas dexa de morder la reputacion de las doncellas quando se dan á galanteos, y para que se contengan se escribió esta fábula.
Agamenon, gefe de la esquadra de los griegos que habia de sitiar la ciudad de Troya, estando haciendo un sacrificio á Júpiter vió una serpiente que se comia ocho paxarillos en un nido, y que tambien devoró á la madre que revoloteaba al rededor: esta serpiente fué convertida en piedra. Calcas explicó este prodigio, asegurando que el sitio de Troya duraria tantos años como paxarillos se comió la serpiente; pero que la ciudad no se tomaria hasta los diez.
Todos los oráculos de la antigüedad eran supersticiones, en las quales han querido imitar las profecías del antiguo Testamento.
Estando la flota de los griegos en un puerto de la Beocia, mató Agamenon una cierva consagrada á Diana: irritada la diosa, movió una tempestad que impidió la salida de las naves. Agamenon consultó al oráculo, y le fué respondido era necesario sacrificar á su hija Ifigenia: dispuso Agamenon el sacrificio; pero Diana libertó á Ifigenia poniendo una cierva en su lugar.
Esta fábula tiene mucha semejanza con el sacrificio de Abraham, y nos hace ver que Dios se satisface apénas ve nuestra obediencia; pues quiere estemos siempre prontos á sacrificarle lo que mas amamos quando lo pida.
Cicno era un hijo de Neptuno que no podia ser herido por mas golpes que recibiese. Combatió por los troyanos quando los acometiéron los griegos, y resistió mucho tiempo los esfuerzos del valeroso Aquiles; pero viendo este príncipe que no podia herirle, se echó sobre él y le sofocó: su padre le convirtió en cisne.
Cicno, hijo de Neptuno, nunca habia sido herido ni vencido; mas al fin tuvo que rendirse al valor de Aquiles. Esto nos manifiesta que no hay fuerza en el mundo que no pueda ser vencida por otra mayor; y enseña tambien á los héroes que no deben vanagloriarse de su espíritu y valor, porque la suerte de las armas es muy incierta.
Los Centauros eran unos pueblos de Tesalia que fueron á las bodas de Piritoo é Hipodamia; y queriendo robar á ésta, los Lapitas con Teseo se lo impidiéron, venciéndolos despues de un largo combate.
Los Centauros se embriagáron en las bodas de Piritoo, y dirigiéron á Hipodamia algunos dichos deshonestos: los Lapitas que eran de Tesalia como ellos, viendo su ridículo atrevimiento, los obligáron á retirarse.
Era Cenis una jóven amada de Neptuno: pidió al dios la convirtiese en hombre invulnerable, y se lo concedió: hizo despues grandes acciones; pero en el combate de los Lapitas con los Centáuros le abrumáron echándole muchos árboles encima. Neptuno apiadado de su desgracia le convirtió en páxaro.
Cenis era un jóven perfecto que durante su infancia pasó por niña á causa de su grande hermosura: quando fué mozo se inclinó á las armas, y se distinguió con grandes acciones; pero fué vencido por fuerzas superiores, figuradas en los árboles; y quando la fábula dice que se convirtió en páxaro, quiere darnos á entender que su fama se extendió por todo el mundo.
Periclimenes, hermano de Nestor, habia recibido de su abuelo Neptuno la virtud de revestirse de quantas formas quisiese: combatió con Hércules en figura de águila, y con las garras y el pico le hirió los ojos; pero viendo Hércules que levantaba el vuelo, le disparó una flecha y le mató.
Periclimenes se valió de muchos artificios para vencer á Hércules; pero todos sus esfuerzos fueron inútiles. La sutileza y engaño de nada sirven contra los que son, como Hércules, verdaderamente fuertes.
Aquiles fué muerto por Páris, que le hirió el talon de un flechazo, siendo el único parage por donde era mortal. Apolo habia guiado la flecha, y le quemó despues de muerto. Vulcano habia fabricado sus armas: su madre le habia hecho invulnerable metiéndole tres veces en el lago Estigio; y como le tenia por el talón, esta parte del cuerpo no habia recibido la virtud que las otras.
Por la muerte del valeroso Aquiles vemos que no era inmortal, y que los mas valientes mueren muchas veces á manos de los mas pusilánimes.
Estos eran dos capitanes griegos que se disputaron por mucho tiempo las armas de Aquiles. Obtúvolas Ulises por sentencia de los principales capitanes de la Grecia, lo qual enfureció tanto á Ayax que se mató á sí mismo, y su sangre fué convertida en la flor que se llama jacinto.
La mayor parte de los hombres creen que el valor y las virtudes militares se deben preferir, para el gobierno de los estados, á la sabiduría y á la política. Dos grandes hombres disputaron por las armas de Aquiles: el uno sobresaliente por el ánimo y la fuerza, y el otro por la eloqüencia y el consejo. Ayax era mas solcado, y en este caso el político pudo mas que el militar. Así los grandes imperios duran poco quando no son gobernados por la sabiduría.
Esta princesa era hija de Dimantes, y casó con Priamo rey de Troya. Despues de la muerte de su marido se retiró sobre el sepulcro de sus hijos, y tuvo tan gran desconsuelo y rabia al ver el cadáver de Polidoro, su último hijo, muerto por la traicion y ambicion de Polimnestor, que arrancó á este los ojos, y quando huía de los tracios, vasallos del tirano, que la perseguian, fué convertida en perra.
El excesivo cariño de esta madre por sus hijos fué la causa de su ruina.
Memnon, hijo de Titon y de la Aurora, fué muerto por Aquiles en el sitio de Troya: su madre obtuvo de Júpiter que las cenizas de su hijo fuesen convertidas en páxaros.
Los páxaros que naciéron de las cenizas de Memnon, significan la fama de su mérito extendida por todo el universo.
Despues de la destruccion de Troya, Eneas se salvó en Delfos con su padre Anquises y su hijo Ascanio, llevando consigo á los dioses Penates. Allí fue recibido de Anio, sacerdote de Apolo, que le hizo mil honras y le trató con mucha magnificencia.
Eneas se nos presenta como un hombre de una virtud tan heroyca, que despues de ver perecer á su patria no dexó de esperar que los dioses le auxiliarian; en efecto, si permitiéron las desgracias que sufrió, fué para exâltar mas su gloria.
Habiendo las hijas de Anio obtenido el poder de convertir quanto tocasen en vino, trigo y aceyte: los Griegos las robaron para que abasteciesen su armada, y ellas recurriéron á Baco, el qual las convirtió en palomas.
Han fingido que las hijas de Anio convertian quanto tocaban en trigo, vino y aceyte, porque habian acumulado muchos frutos con su grande economía.
Orion tenia dos hijas que se presentaron en sacrificio por el bien de su patria, inmolándose ellas mismas con una resolucion heroyca. Dedicáronlas un funeral tan suntuoso, que manifestó la justicia que se hacia á su famosa accion. De sus cenizas saliéron dos jóvenes coronados.
Los jóvenes coronados que saliéron de las cenizas de las hijas de Orion, nos manifiestan que la virtud siempre es recompensada. Este exemplo nos debe excitar á amar á nuestra patria, y á tomar las armas para defenderla, siempre que lo necesite.
Polifemo, cíclope de Vulcano, amaba apasionadamente á la ninfa Galatea, y teniendo zelos de Acia le mató con una piedra que arrancó del monte Etna. Galatea que habia profesado cariño á Acis, convirtió su sangre en un rio de su nombre que pasa por Sicilia.
La ninfa Galatea sintió mucho la muerte de su amante Acis, y vertió tantas lágrimas sobre su sepulcro, que dió lugar á que se dixese habia convertido en rio la sangre de su amante.
Glauco era un pescador que habiendo comido una yerba que vigoraba á los peces, se arrojó al mar y fué reconocido por dios marino. La parte superior de su cuerpo era de hombre, y la inferior remataba en cola de pescado.
Glauco era un pescador muy hábil que nadaba con la mayor perfeccion: salió un dia del puerto de su pueblo á vista de los habitantes, y nadó hasta que le perdiéron de vista: salió del mar en un parage oculto, donde se mantuvo algunos dias: volvió despues al puerto á vista de gran concurso, y preguntándole sus amigos donde habia estado, respondió que dentro del agua con los dioses marinos; quiso repetir el ensayo, y fué devorado por un gran pez. Como viesen que no volvia se extendió la voz de que los dioses del mar le habian recibido en su compañia.
Circe, mágica famosa, zelosa de Scila porque el dios marino Glauco se habia enamorado de ella, envenenó el agua donde se bañaba, y la hizo tomar del vientre abaxo una figura tan horrible que, causándola horror á ella misma, se precipitó en el mar de Sicilia, y fué convertida en un peñasco, contra el qual las olas forman un ruido parecido al ladrido de los perros.
Los zelos son una pasion que ciega á los que se entregan á ella; pues cometen los mayores crímenes, como lo vemos en Circe, que se sirvió del veneno contra Scila, de quien estaba zelosa.
Los Cecropes eran ciudadanos de unos pueblos muy lascivos y engañosos. Júpiter los convirtió en monos, y los destinó á la isla Pitecusa. Pitecos es palabra griega que significa mono.
Los monos son regularmente de inclinaciones perversas; y esto dió lugar á Ovidio para decir que los hombres lascivos y engañosos fueron convertidos en estos animales.
La Sibila que se llamó Cumea por ser natural de Cumas, era una doncella de quien se enamoró Apolo, y prometió concederla quanto deseaba. Ella pidió vivir tantos años quantos granos de arena tenia en las manos; lo qual la fué concedido, y llegó al mayor extremo de decrepitud, de modo que la quedó solo la voz para anunciar lo venidero.
Las Sibilas eran doncellas que anunciaban lo por venir. Apolo se enamoró de Cumea, y viendo que pasaba la vida inocentemente se la alargó. Esta muger quiso mas que tuviese término su vida conservando la castidad, que ser inmortal perdiéndola.
Luego que Eneas llegó á Cumas fué á la cueba de la Sibila, y la suplicó le conduxese á los infiernos, porque deseaba consultar con su padre sobre el tiempo advenidero: concedióle Cumea la peticion, mostrándole un ramo de oro para que le cortase. Eneas lo hizo, y recorrió luego todos los estados de Pluton: vió á su padre Anquises, y supo todos los peligros que habia de pasar ántes de llegar al fin de sus empresas.
Por esta fábula han querido enseñarnos que para el que quiere seguir la virtud, no hay camino inaccesible.
Ulises, hijo de Laertes rey de Itaca, era un gran capitan: quando fué á la guerra de Troya robó el Paladion: despues de la toma de la ciudad navegó diez años: quebró el ojo á Polifemo, porque este gigante había devorado algunos compañeros suyos: fué á la Grecia y descendió á los infiernos: despues naufragó, salvándose en una tabla: fué á ver á su muger Penelope en trage pobre y desconocido, y mató á todos los que habian intentado seducirla durante su ausencia.
Esta fábula se dirige á los militares, advirtiéndoles procuren imitar las intrépidas acciones de este jóven.
Los compañeros de Ulises se presentaron á Circe, la qual les dió buena acogida y les dispuso una bebida muy deliciosa; apénas la hubiéron bebido, fuéron convertidos en cerdos por los encantos de esta maga.
Estando la tropa de Ulises con Circe, á fuerza de beber se embriagaron, y han fingido que se convirtiéron en cerdos, porque los beodos se parecen mucho á estos animales.
Pico era un rey de Italia, á quien Circe convirtió en el páxaro llamado Picoverde, irritada porque no condescendió á sus deseos impuros.
Circe hizo pasar por salvage á Pico porque la despreció. Nosotros debemos loarle por no haber querido condescender con los deseos de esta muger impura.
Diomedes fué un capitan que hirió la mano á Vénus estando en el sitio de Troya. La diosa para vengarse convirtió en páxaros á quantos volvian con él en su nave, y fuéron llamados los páxaros de Diomedes.
Venus nos representa la divinidad ultrajada, castigando á los compañeros del hombre que la ofendió. Esto nos debe retraer de las malas compañías.
Las naves de Eneas eran fabricadas con pinos consagrados á Cibeles: esto obligó á la diosa á pedir á Júpiter las convirtiese en ninfas que luego Juno las puso fuego. Esta fábula se ve en Virgilio.
La piedad de Eneas ha obligado á decir que los dioses, por conservar sus naves, las habian convertido en ninfas.
Un Pastor se burló de unas ninfas que baylaban, remedándolas ridículamente, y fué convertido en olivo salvage en castigo de su grosería.
Es fácil de conocer que esta fábula se inventó para manifestar que las burlas son insufribles en la sociedad civil, y que se debe desterrar de ella á los burlones.
Eneas, despues de muchos trabajos, llegó á una extrema vejez, y en consideracion á su virtud, y á los ruegos de su madre Venus, fué recibido en el número de los dioses.
Este es el retrato de un hombre ilustre por su piedad y valor, qualidades que le han exâltado hasta llegar los poetas á fingir que se le habia colocado en la clase de los dioses.
Vertumno, dios de la primavera, se enamoró de la bella Pomona, y no pudiendo conseguir la amase, tomó la forma de una muger anciana, y habiéndola persuadido á que se casase con él, volvió á su primera forma y se desposó con ella.
Vemos por esta fábula el poderío que las mugeres ancianas tienen para seducir á las jóvenes: éstas las creen fácilmente sin recelo, y su exemplo las conduce fácilmente al mal.
Ifis era un hermoso jóven que amaba extremadamente á Anaxârete, y como no consiguiese verse correspondido, se ahorcó delante de su puerta: apénas Anaxârete lo supo se burló, y la diosa Vénus la convirtió en peñasco en castigo de su insensibilidad.
De esta fábula debemos sacar dos provechos: el uno no abandonarnos á la pasion del amor; y el otro no complacernos del daño del próximo, sino compadecerle.
Rómulo, despues de muchas conquistas, fué llevado al cielo, y puesto en el número de los dioses con el nombre de Quirino: su muger Hersilia fué recibida entre las diosas con el nombre de Ora.
Esta fábula ha sido inventada, como otras muchas, para excitar á los jóvenes á la virtud por la esperanza de la recompensa, que los hará eternamente dichosos.
Micilo era hijo de Alemon, y habitante de Argos: salió de su patria para ir á Italia, donde fundó una ciudad sobre la ribera de Hesar, que llamó Crotona, por haber sido enterrado allí Croton.
Este libro no contiene transformaciones; pues no se leen en él mas que epítomes, los quales solo tienen relacion con la historia.
Pitágoras fué un gran Filósofo, que salió de su pais para Italia, y se retiró á Crotona, donde enseñó su doctrina. Numa Pompilio le fué á oir, y quedó admirado de sus razones.
Pitágoras declamó contra la disolucion, y exhortó á la frugalidad: creyó, como los egipcios, en la trasmigracion de las almas, la qual es un gravísimo error.
Despues de la muerte de Rómulo, el pueblo colocó en el trono á Numa, en consideracion á su piedad. El estableció ceremonias, sacrificios, sacerdotes, agoreros, y en fin todo lo perteneciente al culto de los dioses: reynó largo tiempo, y en su muerte fué llorado de todo el mundo, y particularmente de su muger Egeria, que se retiró á la selva Aricina, á fin de que nadie interrumpiese sus lágrimas.
Rómulo habia fundado el imperio romano á fuerza de armas; y Numa Pompilio le conservó por la piedad y religion que estableció en el pueblo.
Hipólito era hijo de Teséo: Fedra su madrasta se enamoró de él, y no pudiendo atraerle á sus deseos, le acusó de haberla querido violentar: esto le obligó á huir de su patria, y un monstruo marino espantó los caballos de su carro, el qual se volcó y fué Hipólito hecho pedazos: Diana atendiendo á su castidad hizo que Esculapio le resucitase.
La historia de Hipólito tiene alguna semejanza con la de Josef, y con la de otros príncipes, de quienes la historia cuenta han sido sacrificados á la furiosa lascivia de sus madrastas. Esto nos enseña á conservar siempre la castidad, virtud que no queda jamas sin recompensa.
Egeria, muger de Numa, se retiró á los bosques para llorar la muerte de su esposo, y deshaciéndose en lágrimas, fué convertida en fuente.
Este es otro exemplo del amor que deben profesar las mugeres á sus maridos.
Un Aldeano de Toscana, estando labrando, vió un terron que se movia por sí mismo, el qual dexando su primera forma, tomó la de un niño que empezó á hablar al instante anunciando lo por venir, y le puso por nombres Tages.
Tages era un hombre ilustre por su sabiduría, y fingiéron venia de un nombre de tierra, porque era de baxo nacimiento.
Estando Rómulo sobre el monte Palatino, fixó su dardo en el suelo, y al instante produxo raices, ramas y hojas, formándose un grande árbol que daba mucha y fresca sombra.
Se ha dicho que habiendo este rey arrojado un dardo, se convirtió en un grande árbol, y que este fué un presagio de que el Imperio Romano llegaria á ser muy floreciente.
Cipo Venulio, volviendo victorioso á Roma, al llegar cerca del Tíber reparó que tenia cuernos en la cabeza: consultó á los adivinos para saber qué anunciaba aquella novedad tan extraordinaria, y diciéndole era señal de que reynaria en Roma, no quiso entrar en la ciudad.
Cipo era un Pretor romano que rehusó el Imperio, y por esto fingiéron segun el lenguage de los antiguos, que tenia cuernos en la cabeza, para expresar la fuerza de su grande espíritu.
Habiéndose introducido en Roma una peste que hacia grande estrago, recurriéron á Esculapio, dios de la medicina, y le llevaron por la ciudad en la figura de una serpiente. Todos los habitantes fuéron aliviados de sus males, y en reconocimiento le fabricaron un templo, donde fué adorado baxo la figura de un dragon.
Esta fábula tiene semejanza con la serpiente de metal que Moysés hizo colocar en el desierto, dándola virtud para curar todas las enfermedades de los israelitas. La serpiente es símbolo de la prudencia, que deben tener los médicos, y es animal que sirve para curar muchas enfermedades.
Julio César, emperador de los romanos, fué asesinado por Bruto dentro del Senado, y su alma se convirtió en un cometa, que la diosa Venus introduxo en el cielo, por lo que la memoria de este grande hombre durará eternamente.
Despues de la muerte de Julio César apareció en el cielo un cometa, que dió lugar á esta fábula.
Se hallará en el Despacho de las obras de Matemáticas de D. Benito Baile en la Real casa de la Academia de S. Fernando, calle de Alcalá, á 6 reales enquadernado en papel, y á 8 en pasta.