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A secreto agravio, secreta venganzaA secreto agravio, secreta venganzaPedro Calderón de la BarcaJornada 3: Escena XIV
Jornada tercera
Escena XIV
DONJUAN. -DICHAS.
DON JUAN
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(Ap.) ¡No sé cómo el corazón
tan grandes rigores sufre,
sin que se rinda a los golpes
de una y otra pesadumbre!
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DOÑA LEONOR
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Señor don Juan, pues ¿no viene
con vos don Lope?
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DON JUAN
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No pude
esperarle, aunque él me dijo
que antes que en el mar sepulte
el sol sus rayos, vendrá.
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DOÑA LEONOR
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¿Cómo puede, si ya cubren
al mundo pálidas sombras,
y al cielo lóbregas nubes?
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DON JUAN
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A mí me tuvo violento
un gran disgusto que tuve,
y esperar no puede a nadie
el que de sí mismo huye.
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DON LUIS
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(Dentro.) ¡Válgame el cielo!
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DOÑA LEONOR
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¿Qué voz
tan lastimosa discurre
el viento?
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DON JUAN
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En tierra no hay nadie.
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DOÑA LEONOR
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En las ondas se descubre
del mar un bulto, que ya
siendo trémulas las luces
del día, no se determina
quién es.
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DON JUAN
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Osado presume
escaparse; pues parece
que hacia nosotros le induce
piedad del cielo. Lleguemos
donde valientes le ayuden
nuestros brazos.
(Vase.)
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