Carta de Túpac Amaru a Micaela Bastidas
En algún lugar de la Cordillera de los Andes, Enero de 1782.
Micaela:
Amor mío, por primera vez me encuentro rodeado de hombres verdaderos; hay muchos hombres: inteligentes, audaces, prudentes, fríos, calculadores, desleales, ignorantes, pero pocos decentes e idealistas. Esos pocos entre los cuales me incluyo, con el tiempo van a ser legiones, a medida que nuestro ejemplo vaya derrotando al inhumano conquistador. Contigo por primera vez he sentido el Amor. El Hombre sin Amor es Incompleto. La civilización que nos quieren imponer ha escrito mucho sobre el amor, pero la nuestra hace posible la experiencia del verdadero amor. Por todo eso, para dar dignidad y amor a este mundo, estamos luchando.
Todos mis indios, son hombres nuevos, hombres silenciosos, pero tremendamente revolucionarios. Nuestro Amor también comenzó silenciosamente… ¡Qué misterio, verdad? Toda la selva verde y las altas montañas, todo el mar que contemplo en el cual me baño, la tierra que piso, las estrellas que miro ¿de dónde vienen? Y tú, ¿de qué mundo vienes?
Porque mujeres de tu condición son raras manifestaciones que de tanto en tanto aparecen en la Tierra para purificarla y embellecerla. Tú eres amor, eres para ser amada.
Cuando ama, la mujer es vibración que estremece y conduce a un mundo superior. Desde que te amo, vibro, trato de superarme. Cuando te beso, se agita mi alma, siento la presencia de la vida en plenitud. Juntos somos la vibración profunda que trata de arrancarle el misterio al universo entero.
La energía secreta de tus ojos siempre me impulsan hacia nuevos objetivos... ¡A vencer!
Quizás para ello se precise una vida, miles de hombres nuevos... Pero también sé que si estos hombres son amados por mujeres como tú, harán todo lo posible y los plazos se acortarán. Contigo junto a mi, tengo fe en mi estrella.
Mientras tú me ames formaré parte de la forja de los hombres que pelean por la libertad de todos los hombres. Tú eres el comienzo de mi libertad individual. Juntos somos la expresión telúrica de nuestra raza.
En estos momentos me avisan que los conquistadores nos están cercando...
Pronto me uniré a ti.
— Túpac Amaru.