Página:Alexander von Humboldt - Cosmos - Tomo I.djvu/21

De Wikisource, la biblioteca libre.
Esta página ha sido corregida
— XVII —

tros, la mayor que hombre alguno habia por entonces alcanzado.

Humboldt y Bonpland se dirigieron luego al Perú, descansando en Lima algun tiempo; desde allí fueron á Guayaquil y se embarcaron para Méjico á donde arribaron en abril de 1802.

De gran importancia y fecundos resultados para la ciencia, fueron los numerosos trabajos de los intrépidos viajeros en esta comarca de la América, del dominio de los españoles en aquella época. Embarcáronse para la Habana en marzo de 1804. Despues de algun tiempo se dirigieron á los Estados-Unidos, visitaron Filadelfia y Washington, haciendo conocimiento con Jefferson, presidente de aquella república, hombre ilustrado que los acogió con distincion. Tuvo allí Humboldt noticia de que la Academia de Ciencias de París le habia nombrado socio correspondiente, y el 9 junio de 1804 partió para Francia.

Su llegada a la capital fue un triunfo, tanto mayor, cuanto que habían corrido noticias de su muerte.

Humboldt comenzó á ocuparse, una vez en París, de la publicacion del célebre Viaje á las regiones equinocciales del Nuevo Continente, cuya primera entrega salió en 1807, no terminando la obra hasta 1827. Al levantamiento de este trabajo monumental que consta de 8 tomos en 4.° y 15 en folio, cooperaron con sus conocimientos Arago, Cuvier, Gay-Lussac, Kunth, Klaproth, Wildenow, Oltmanns, Latreille, Valenciennes y Vauquelin, en mas ó menos parte. Humboldt se ligó íntimamente con Gay-Lussac y Arago, á quienes tuvo por contrarios con ocasion de su Memoria sobre la descomposicion química del aire atmorsférico, publicada en Alemania antes de su viaje á América.

Humboldt y Gay-Lussac pasaron juntos á Italia en marzo de 1805, atravesaron los Alpes y Apeninos, llegando á Roma, donde le esperaban su hermano Guillermo, y su amigo Leopoldo de Buch. Ademas de los trabajos y esperimentos meteorológicos que practicaron durante su espedicion, Humboldt con Gay-Lussac y Buch visitaron el Vesubio, precisamente en una de sus más terribles esplosiones.

A su regreso de Italia, hace Humboldt una escursion á su patria, donde fue celebrada su vuelta por una medalla. Durante