cosa que no suele ser muy comun. De este modo se ha formado el circo de Nisyros en el mar Egeo (11), y el de Palma, descrito con notable erudicion por Leopoldo de Buch. Sucede á veces que una mitad del recinto se destruye, y el mar labra en ella cuencas donde levantan sus celdillas las familias de los corales. Los cráteres de solevantamiento están con frecuencia llenos de agua aunque se hallen situados en lo interior de los continentes, y dan entonces al paisaje un carácter particular y un aspecto sumamente pintoresco. Su formacion es independiente de la naturaleza de los terrenos: se producen igualmente en el basalto que en el traquito, en el porfiro leucitico (Somma), ó en las mezclas de augita y de labrador análogas á la dolerita; y de aquí el que ofrezcan los bordes de los cráteres tan grande variedad de formas. «Estos recintos no presentan señal alguna de erupcion, en ellos no hay abierta comunicacion permanente con un foco subterráneo, y es raro encontrar vestigios, ni en el interior, ni en las cercanias de estos cráteres, de una actividad volcánica todavía en accion. Las fuerzas que producen efectos tan considerables han debido permanecer acumuladas por largo tiempo y hundirse en el interior, antes de vencer la resistencia que oponia la presion de la masa superior, y de haber podido levantar, por ejemplo, nuevas islas sobre el nivel del mar, quebrando rocas de formacion granítica y conglomerados (capas de toba que contienen plantas marinas). Los vapores fuertemente comprimidos se escapan por estos cráteres; pero la enorme masa asi levantada vuelve á caer, y cierra inmediatamente la abertura que originó aquel violento esfuerzo, de suerte que no llega á constituirse un volcan (12).»
Un volcan propiamente dicho, no existe sino allá donde hay una comunicacion permanente del interior del globo con la atmósfera. Entonces, la reaccion del interior con-