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mio (97); en la disminucion que produce la falta de arbolado en la humedad atmosférica; y en la cantidad anual de lluvia (98); en la depresion de la temperatura á medida que se sube sobre el nivel del mar; y por último, en el límite inferior de las nieves perpétuas. Pedro Mártir de Anghiera fué quien observó por primera vez, en 1510, que este límite es una funcion de la latitud geográfica. Alonso de Ojeda y Américo Vespucio habian visto desde el año 1500 las nevadas montañas de Santa María (Tierras nevadas de Citarma). Rodrigo Bastidas y Juan de la Cosa las percibieron mas de cerca en 1501; pero únicamente despues de haber escrito el piloto Juan Vespucio, sobrino de Américo Vespucio, á su protector y amigo Anghiera, sobre la espedicion de Colmenares, fué cuando la region de las nieves tropicales en las montañosas costas del mar de las Antillas adquirió una importancia que podríamos llamar cósmica. Entonces se relacionó el límite inferior de las nieves con las influencias generales de la temperatura y de los climas. Tratando de esplicar Herodoto, en el capítulo 22 de su libro II, las mundaciones del Nilo, niega de una manera absoluta que pueda haber nieve en las montañas, al Sud del trópico de Cáncer. Verdad es que la espedicion de Alejandro llevó 4 los Griegos hasta los nevados picos del Indo-l: ho (ón 'azámpa); pero estos picos están situados entre los 34 y 36" de latitud Norte. Una sola vez, que yo sepa, se hace mencion de nieves en la zona ecuatorial, antes del descubrimiento de América y del año 1300; este detalle en que no pararon mientes los físicos, se encuentra en la célebre inscripcion de Adulis, que Niebhur cree anterior á los tiempos de Juba y de Augusto. La certidumbre adquirida de que el límite inferior de las nieves depende de la distancia del lugar á los polos (99); la primera nocion de la ley en virtud de la cual el calor decrece verticalmente, de donde puede deducirse la existencia de
