«presentando el grupo volcánico de las islas Eolicas 6 de Lipari, al norte de la Sicilia (8). Las decoraciones escenicas destinadas 4 realzar aun mas con nuevo prestigio las obras maestras de Esquilo y de Sófocles, debieron contribuir al aumento paulatino de loslímites del arte (9), haciendo sentir mas vivamente la necesidad de imitar, teniendo en cuenta la pespectiva y de una manera propia para reproducir la ilusion, ya un palacio, ya un bosque, rocas y objetos de la misma naturaleza.
Perfeccionada así, merced á las exigencias del arte dramática, la pintura de paisaje pasó del teatro á las habitaciones de los particulares, y mas tarde tomaron este lujo los Romanos, de los (riegos. Las columnas v las pinturas decoraban á la vez los pórticos: anchos lienzos de pared estaban cubiertos de paisajes cuyo horizonte, limitado al principio, se ensanchó rapidamente (10), hasta el punto de poder seguir en él las orillas del mar, abarcar ciudades enteras Ó vastas llanuras en las que pacian rebaños de ovejas (11). Ludio, pintor del tiempo de Augusto, fué el que, no diré inventó, sino el que puso en moda estas pinturas murales (12), dándoles nuevo interes con las figuras que en ellas introdujo (13). Casi por el mismo tiempo y aun quizás medio siglo antes, en la brillante época en que forecia Vikramaditya, un poeta indio alude 4 la pintura de paisaje como á un arte muy cultivado. En el hermoso drama de la Sakunta/la muéstrase al rey Duschmanta el retrato de su adorada: no queda satisfecho de él, y quiere que el pintor reproduzca los parajes de la predileccion de su amante: el rio Malimi con un banco de arena á donde van á posarse los purpúreos flamencos, una série de colinas que se unen al Himalaya, y sobre esta colina, algunas gacelas. Era esto mucho pedir; y tales exigencias demuestran una gran confianza en los medios de que el arte podia disponer por entonces.