APOLOGIA DE SÓCRATES. (1)
I.
Porqué razon el Sábio ateniense no queria preparar sus medios de defensa.Trasmitir á la posteridad la conducta del célebre Sócrates cuando fué citado ante el Jurado, y decir las determinaciones que tomó respectivamente á su defensa y á su muerte, paréceme en verdad un digno asunto. Otros han escrito tambien (2) sobre lo mismo, y todos convienen en la sublime dignidad de su lenguaje. (3) Es, pues, una realidad que Sócrates en aquellas circunstancias habló con magnificencia. Mas no se han explicado claramente los motivos que tuvo para juzgar en tal ocasion la muerte preferible á la vida: de suerte que cabe dudar si la razon estuvo entonces á la altura de la elocuencia.
Pero su amigo Hermógenes, hijo de Hipónico, (4) nos ha dado sobre esto detalles que ponen en perfecta consonancia la elevacion de sus palabras con la de sus ideas. En efecto, cuenta que viéndole discurrir sobre tódo, ménos sobre su causa, le dijo: ¿No convendria, mi querido Sócrates, que discurrieras tambien algo sobre tu defensa?—A lo que el filósofo le contestó: Pues qué ¿mi vida entera no te