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NUÑEZ DE PINEDA Y BASCUÑAN.

me hizo. Como despues de este asalto me fué retirando Maulican la tierra adentro, por asegurarme la vida; y habiendome llevado a casa de un cacique en las riberas del rio de Cholchol, lo que allí obré en el servicio de Dios nuestro Señor, bauptizando muchos niños y muchachos discursivos, enseñándoles la dotrina cristiana, y otros ejercicios de virtud que admitian con sumo gusto; y de la muerte que tuvo uno de los recien bauptizados con ciertas esperanzas de su salvacion. Del entierro que a su usanza se le hizo; de las ceremonias que hacen los curanderos que llaman maches, por arte del demonio, y cómo se apodera de ellos, haciendo las mas raras acciones que se pueden haber visto ni imajinado jamas. De como dispuso Maulican despues de algunos dias, pasase a la Imperial a un festejo a que fué convidado. Como se verá en el siguiente discurso.

CAPITULO I.

Que trata de como luego que llegó a sus tierras Maulican, a los quince dias enviaron los caciques de la cordillera las pagas que ofrecieron por mí, con cuatro embajadores, y del mal despacho que tuvieron. Al cabo de algunos dias, que los comarcanos, amigos y parientes de Maulican mi amo habian festejado su llegada con mucha chicha, bailes y entretenimientos, despacharon los caciques de la cordillera, en conformidad del trato que en el camino habian efectuado, cuatro embajadores con las pagas prometidas. Y como el rio con la continuacion de las aguas venia caudaloso y abundante, sin que se pudiese pasar, ménos que dando voces para que enviasen la canoa, que estaba a vista de la casa; habiendo llamado de la otra banda, imajinó luego Maulican, que sin duda serian los mensajeros, y que entre ellos vendria algun cacique de los contenidos en el trato; por cuya causa determinó que no pasasen ni llevasen a la otra banda mas que la canoa pequeña, en que no cabia mas que el canoero o balseador y otro compañero, para que no pudiese venir en ella sino era tan solamente uno de ellos, y que este fuese a hablar ante todas cosas con su padre Llancareu, toque principal y dueño de aquel pasaje: hizo el barquero lo que le ordenaron y pasó con él uno de ellos y mas principal embajador, que despues de haber visto a Llancareu, como estaba dispuesto, se encaminó a dar su embajada a Maulican mi amo, sobre el trato efectuado en el camino, a quien recibió no con buen semblante ni buenas razones. Y habiendo querido el mensajero desmedirse con palabras mayores, diciendo que eran malas correspondencias las que usaba con to la su parcialidad, y que mirase lo que hacia porque sus caciques habian de sentir en extremo la falta de su palabra y la poca estabilidad de su trato, por parecerles hacia chanza y burla de la autoridad de sus personas: a que respondió Maulican, que no hacia caudal de sus razones, que estando en su tierra y entre los suyos no los habia menester de ninguna suerte, y que la palabra que les