tos bárbaros infieles no es tan de bestia fiera como algunos la pintan, pues se sujetan mansos al halago y reconocen el bien agradecidos; ya este peso se les imprime en el corazon el agravio y ofensa recibida, como se les quedó arraigada y imprimida en el alma la que nuestros primeros conquistadores les hicieron, que con la doctrina y enseñanza de este viejo cacique Quilalebo, y con las noticias de otros antiguos, se ha perpetrado [sic] el rencor y el odio que en sus principios adquirieron de nuestras acciones mal encaminadas. Con que por esta via me parece hoi un imposible querer sacarlos de su usanza y reducirlos a policía cristiana y al conocimiento verdadero de nuestra sancta fee católica, así por lo dicho como porque en la enseñanza y doctrina que les ofrecemos, y en los tratos que usamos con ellos, imitamos mucho a sus primeros maestros. DISCURSO IV. BIBLIOTECA NACIONAL BIBLIOTECA AMERICANA JOSE TOPIBIO MEDINA"
En que se refiere de la suerte que me quedé con mi grande amigo el cacique Quilalebo, los agasajos y regalos que me hizo en su casu, las conversaciones que tuvimos, en que me refirió cosas particulares de los antiguos españoles: la poca cristiandad con que fueron industriados, de los-festines y entretenimientos lascivos que acostumbraban en sus casas, de la poca reverencia que tenian a los templos, y del ejemplo que nos dan los antiguos Ethnicos en el culto de sus falsos dioses y en la veneracion de sus templos. Trata tambien de algunos casos raros y subcesos particulares; de como el informe que a su R. M. hicieron para declarar por esclavos a estos naturales, fué siniestro, y la guerra que a los principios se les entró haciendo, no fué justificada, por las razones que para ello se insinúan; a cuya causa esta guerra de Chille es inacabable, y cuando se juzgue estar en mejor estado su conquista, ha de ser para su total ruina, porque ya desenfrenadamente, por la cudicia de las piezas esclavas, se atropellan las leyes de nuestra relijion cristiana. que aun las palabras de santos doctores estan a riesgo de perder el crédito en estos reinos, porque todas las cosas andan al reves y al trocado. De los trabajos y penalidades que padecen los soldados deste reino; del poco premio que tienen los que mas sirven; de como el sueldo que el Rei N. S. Les manda dar, se lo merman y comen muchos a dos caTrillos, y a su costa visten sedas y delicados lienzos, y ellos andan desnudos y muertos de hambre. De la reparticion de los situados, de la suerque lo merman, y las trazas que hai para enriquecer otros con él; de como ha habido en los oficios plumarios y oficiales mayores que no teniendo de sueldo mas que tun solamente setecientos o ochocientos pesos, han gastado al año mas de cinco mil, habiendo entrado en ellos sin cami-lo te
