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HISTORIADORES DE CHILE.

mas desdichado y la voz del necesitado pobre le recuerde cuidadoso, como lo acostumbraba el capitan troyano, que daba a sus fatigados miembros una tardia quietud y un sosiego acelerado en las orillas del mar o de los rios, como lo manifiestan los siguientes versos: la ripa gelideque sub atheris axe procubuit Eneas, seramque dedit per membra quietem. BIBLIOTECA NACIONAL BIBLIOTECA AMERICANA MOSE TORIBIO MEDINA Al que importa no dormir Aunque el sueño le combata, Tenga en memoria al pirata Que le viene a combatir: Procure en esto seguir Al troyano valeroso, Que buto steve temps En las riberas del rio. No tuvo mas que al rocio Por su capa y su rebozo. sontaiyai di Porque se ha de dormir de tal suerte y en tal cama, que fácilmente y a cualquier movimiento se hallen dispiertos los sentidos. Dice San Gerónimo, que el desvelo del demonio y su mayor cuidado no es otro que procurar adormecer el ánimo del que se muestra mas vijilante y solícito en la obligacion de lo que está a su cargo y es conveniente; y esto lo solicita con mas veras en los príncipes superiores que gobiernan, y prelados dilijentes, que como pastores vijilantes, si se duermen y descuidan, corren grandes riesgos sus rebaños; y para que en el peligro no naufraguen los siervos, los vasallos y feligreses, velen cuidadosos los pastores, esto es, los reyes, príncipes superiores y prelados, que de esa suerte reconocerán atentos las necesidades de los pobres humildes, que por tales no ven el rostro jamas a la justicia; y es bien que la justicia se desvele en buscarlos, ampararlos y defenderlos, para que no se diga de ellos lo que el profeta Nahum dijo del neglijente rei y dormido superior: tu pueblo (dijo) está esparcido por esos montes, sin pastor que le recoja, y sin superior que le defienda. Al cabo de dos horas, el viejo Quilalebo mi camarada con alegre semblante despertó del sueño, llamándome apresurado y significándome lo que en mi favor habia soñado. Habeis de saber, capitan (me dijo), que acabo de llegar de vuestra tierra, con una capa azul que me habiais dado, habiéndoos dejado con gusto entre los vuestros, que con grande aplauso y regocijo os recibieron. Mirad que esto no puede faltar, porque nunca mis sueños han salido en vano. Yo os agradezco (respondí al caeique) el consuelo y alivio que con vuestras proféticas palabras dais a mis pesares y congojas, en que se conocen los afectos y verdaderos deseos que teneis de mi rescate, y de que vuelva gustoso a gozar de mi libertad perdida; porque el sueño no es otra cosa que una representacion viva y eficaz de lo que en el discurso del dia se continúa en la memoria, y así juzgo que habeis soñado lo que vuestro amor y buena vo-